Todas hemos pedido alguna vez que nuestra pareja esté obsesionado con nosotras para así evitar los corazones rotos y la infidelidad. Sin embargo, esta es una arma de doble filo porque puede exponernos a conductas manipuladoras y controladoras.
Es importante saber que el amor y la obsesión son cosas totalmente distintas, ya que lo segundo está más vinculado a la dependencia emocional, lo que da pie a toxicidades en el vínculo que no son tan agradables.
Razones por las que tu pareja esté obsesionado contigo no es algo bueno
Será una persona insegura
Cuando alguien te gusta, las hormonas se apoderan de tu cerebro y modifica tu manera de percibir, sentir o decir cosas. La obsesión genera pensamientos intrusivos que ocasionan comportamientos extremos, como perdirte a cada rato que valides lo que sientes por él o tendrá inseguridades sobre la relación, las cuales no solo se manifiestan en celos sino también en dudas y conflictos.
Se puede perder el espacio personal
Durante la manifestación de la obsesión suele ocurrir que aparece un intenso deseo de estar cerca de esa persona, lo que puede hacer que la intimidad personal se vea comprometida y que se produzca una invasión del espacio ajeno.
Tendrá altas expectativas
Una persona que se obsesiona en las relaciones de pareja siempre tendrá altísimas expectativas que nadie puede cumplir o son difíciles de complacer. Al no satisfacerlas, origina frustración, peleas, decepciones, comportamientos pasivo-agresivos y más.
Tendrá poco amor propio
La persona que la padece tiene un deseo de ser amado tan fuerte que llega a causarle un malestar considerable en su vida diaria. Esos pensamientos, sentimientos y conductas obsesivas conducen a la persona a la realización de conductas compulsivas, que pueden ir desde beber alcohol o darse atracones de comida, hasta la baja autoestima.
Será posesivo
Que tu pareja esté obsesionado contigo hará que sientas que eres solo de él, cosificándote, lo que puede dar pie a imposiciones que generen en ti miedo u obligaciones, perdiendo lo bonito de amar desde la libertad.
