Por Richard Dagenais
Algunas dietas pueden resultar en una pérdida de peso significativa en una persona, mientras que la misma dieta puede producir una pérdida de peso insignificante en otra. Nuevas investigaciones hechas por Texas A&M University sugiere que la eficiencia de un régimen alimenticio depende en la composición genética del individuo que la consume.
Los investigadores usaron cuatro cepas de ratones genéticamente distintas para su estudio. Alimentaron a los ratones de las cuatro cepas con distintas dietas, incluyendo una dieta mediterránea tradicional, una dieta japonesa tradicional, una dieta ketogénica (alta en grasa y baja en carbohidratos) y comida tradicional de ratón.
Los científicos se esforzaron por asegurarse que las dietas se parecieran a las que consumimos los humanos tanto como fuera posible. Por ejemplo, basaron la dieta japonesa en arroz, incluyendo extracto de té verde. Usaron trigo como el carbohidrato principal en la dieta mediterránea, incluyendo extracto de vino rojo.
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Durante un periodo de seis meses, los ratones podían comer tanto como quisieran, mientras que los científicos monitoreaban exactamente cuánto consumían. Los resultados que obtuvieron fueron muy dispersos.
Mientras que la mayoría de las cepas de ratones que comía la llamada dieta occidental mostró una creciente obesidad, un nivel de colesterol perjudicial y enfermedad de hígado graso. En otro caso, otra cepa de ratones mostró los efectos negativos de salud comiendo la dieta occidental, pero fue capaz de consumir una dieta ketogénica, alta en grasa y baja en carbohidratos, sin mostrar problemas de salud.
Otra cepa diferente se volvió obesa con los síntomas de síndrome metabólico comiendo la dieta ketogénica, mientras que se registraron reacciones mucho más saludables a la dieta occidental. La dieta ketogénica aumentó la quema de calorías en las cuatro cepas, pero algunos ratones de una cepa en particular se forzaron a comer demasiado de esta dieta y eventualmente se volvieron gordos y poco saludables.
«Dadas las similitudes metabólicas y genéticas entre los humanos y los ratones, es altamente probable que el nivel de diversidad de respuesta a una dieta en nuestro estudio pueda observarse también en humanos», explica el Dr. William Barrington de North Carolina State University.
El Dr. Barrington agregó, «Ya que existen diferentes dietas óptimas para diferentes individuos, que enfatiza la necesidad de una nutrición de precisión, lo que podría identificar los patrones dietéticos óptimos para cada persona».
Las recomendaciones dietéticas personalizadas harían la vida de las personas que buscan perder peso mucho más fácil. La ciencia admite que reconocer las diferencias metabólicas, fisiológicas y genéticas en los individuos es fundamental.
Ahora, el equipo de investigación de Texas A&M está trabajando para identificar los genes y los mecanismos biológicos que influencian las respuestas dietéticas, esperando que una prueba genética considere cuidado de la salud y profesionales de fitness con la información necesaria para adaptar dietas saludables y efectivas a diferentes individuos.