México aún tiene muchos problemas para llevar servicios básicos a comunidades rurales en las que la infraestructura es prácticamente nula. Un grupo de investigadores del Instituto de Energías Renovables (IER) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA) y la empresa Módulo Solar se han dado la tarea de diseñar calentadores solares autocontenidos para llevar agua caliente a las comunidades.
Algunas comunidades el agua es muy escasa y de baja calidad, para hacerla apta para el aseo es necesario calentarla en fogones de leña, lo que también consume recursos. Tener agua caliente sin la necesidad de energía eléctrica traerá ahorros para las familias y mayor higiene.
Un calentador solar autocontenido es un sistema que almacena agua en un recipiente ubicado con su superficie de mayor tamaño hacia la posición donde recibe la mayor cantidad de luz solar en promedio. El recipiente se llena con agua y al exponerse hacia el sol, la parte superior transmite el calor del sol al agua.
El interior del recipiente hace la función de un termo que mantiene el agua caliente ya que su interior está aislado. El objetivo del desarrollo de este sistema es que las comunidades rurales tengan agua caliente con un producto mexicano y a un precio competitivo que enfrente la oferta de los mercados asiáticos.
Al producirse en el país también podrán solucionarse problemas locales con materiales novedosos, como la incrustación de sales en las tuberías o la ruptura de éstas al congelarse, sobre todo en la zona norte del país. Este producto mezcla la energía renovable con materiales locales, lo que ayuda aún más al ambiente.