En algunos casos, cuando el gobierno no hace caso o ve por otros intereses, hace falta un poco de ayuda de autoridades divinas. Así se vio en Brasil, durante la visita del Papa Francisco, en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud. El sábado pasado el líder de la iglesia católica recibió a grupos indígenas de la Amazonia, quienes esperaban hacerle saber sobre la situación que viven en la actualidad. Lograron ser escuchados.
Al ser consciente del contexto del Amazonas, el Santo Padre pidió concretamente el “respeto y la protección de toda la creación, que Dios ha confiado al hombre, no para que sea explotada indiscriminadamente sino para que sea convertida en un jardín.” El Papa Francisco también recordó un documento creado por obispos latinoamericanos y caribeños, que donde destacan el peligro en el que se encuentra el Amazonas y los pueblos indígenas que ahí viven.
Las comunidades tradicionales han sido prácticamente excluidas de las decisiones sobre la riqueza de la biodiversidad y la naturaleza. La naturaleza ha sido objeto, y todavía lo es, de agresiones.
En el Amazonas brasileño, ganaderos y agricultores continúan la invasión ilegal. Los indígenas que viven en esta selva tropical protegen la zona, la biodiversidad y sus recursos naturales. Sin embargo, continúa la deforestación y la falta de respeto por esta joya de la madre naturaleza.
La iglesia ha luchado, también, por la protección del Amazonas; así como lo hacen los indígenas. En 2005, Dorothy Stang, monja estadounidense y activista por los derechos de la tierra, fue asesinada por orden de dos rancheros.
La intervención de la iglesia católica va más allá de lo divino; el Papa como jefe del Estado Vaticano, tiene voz política en acuerdos y tratados internacionales. Sin embargo, en esta ocasión la visita fue con otros propósitos. Los ojos de todo el mundo, católicos o no, voltearon a Brasil — sea por las protestas, sea por las fallas logísticas de seguridad o por este comentario ecológico —. Una fuerza que llama a la consciencia de nuestra madre naturaleza. Así que ¡cuidemos de nuestro hermoso jardín!
Fuente: Pope Francis Defends Amazon And Environment In Brazil (The Huffington Post)
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