El empresario Leonardo Farkas ofreció ayuda para la madre que decidió no despertar a su hijo para sus clases virtuales por no tener nada para darle de comer. La historia fue dada a conocer a través de redes sociales por una profesora de Rancagua, quien mostró el mensaje enviado por una apoderada para justificar la ausencia de su hijo.
«Hola, buenos días tía, (el niño) no se va a poder conectar por algo personal. Me da pena contarle, pero le voy a decir para que no piense que faltó por flojo. Hoy no tengo pancito para que tome desayuno y para el almuerzo tengo para hacer un arroz no más, solito, así que para que no pase hambre no lo quiero despertar temprano«, decía el mensaje.
La profesora compartió el mensaje en redes sociales con el mensaje: «Esta es la realidad de Chile. ¡Nuestros niños pasan hambre!«. «Me levanto con este mensaje de una apoderada que no levantará a su niño para que no pase hambre desde tan temprano», agregó.
La situación generó indignación y el mensaje se viralizó rápidamente. En redes, los usuarios iniciaron una campaña para pedirle ayuda al empresario Leonardo Farkas, quien rápidamente ofreció su ayuda para la madre del pequeño.
Así lo dio cuenta a través de su cuenta oficial de Twitter, en donde explicó que muchas personas le hicieron llegar el mensaje. «Por favor, busquen y díganle a esa madre que no tiene dinero para darle de comer a su hijo y llevarlo al colegio, dónde le deposito un millón para que siga luchando por su familia«, puso.
María del Pilar agradeció la ayuda
Cabe señalar que la mujer afectada era María Pilar Núñez, de 29 años. Su caso fue mostrado en el noticiero de Chilevisión, en donde contaron que vive en Rancagua junto a su marido, quien es gásfiter, y sus hijos de 4 y 6 años. Tanto ella como su pareja se encuentran cesantes debido a la pandemia, lo que ha repercutido negativamente en su economía familiar.
La viralización de su caso llegó a tal punto, que la familia comenzó a recibir ayuda de todos los sectores. «Fue emocionante, era como un milagro, que no esperé de nadie, yo no pedía nada. Mucha gente ayudó y le agradezco mucho», comentó la mujer. Y es que además de la ayuda del empresario, fue beneficiada por la municipalidad de Rancagua, que se comprometió con ayudarlos con el pago de tres meses de arriendo y mercadería. La entidad también gestionó un permiso para que el padre pueda trabajar de manera particular.