La que esté libre de pecado en Hollywood, que tire la primera piedra. Ninguna famosa se salva a la tentación de someterse a ciertas cirugías que potencien su belleza natural y Jennifer Lopez no es la excepción.
Aunque la actriz y cantante tenga una de las apariencias más frescas, jóvenes y deslumbrantes del estrellato, la realidad es que también se ha hecho ligeros retoques, aunque claro está, también se desvive por el gimnasio y la comida saludable.
Un gran antes y después
Así como el vino, JLo también ha ido luciendo mejor con el pasar de los años. No solo ha sido la evolución de la moda y el maquillaje, también expertos aseguran que hubo cierta intervención de la mano del hombre.
Según el cirujano plástico Héctor Valdés para TVN, la intérprete de «On the floor» pudo haberse sometido principalmente a un procedimiento para blanquearse la piel.
«Es algo que los modelos latinos y de color hacen bastante en Estados Unidos y que se logra aplicando productos cosméticos y de origen farmacológico«, explicó.
De igual manera agregó que «hay un uso de la toxina botulínica en el contorno de los ojos, cuando era más joven tenía la cejas redondeadas hacia abajo, y ahora están arqueadas hacia arriba», un tratamiento que debe retocarse dos veces al año.
En opinión del cirujano Stephen Mulholland, Jennifer Lopez también ha querido darle más expresividad a su rostro a través de tratamientos no invasivos.
«Su cara se ve un poco más ovalada de lo que recuerdo, así que quizás haya un uso estratégico de los rellenos en la parte superior del pómulo, un poco de relleno de labios, un uso estratégico de botox para que sus ojos se noten más abiertos«, aseguró el especialista.
No obstante, conforme con Soy Carmín, sí que ha tenido un contacto con el bisturí en un aumento de senos, una rinoplastia y una operación en el mentón para tener un rostro asimétrico.
Sea cual fuesen sus métodos, que nos dé el secreto porque a sus 50 años luce hermosa.
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