Al principio creí que era un capricho de estilistas, una “puntada” (como decimos en México), un truco de riesgo para atraer la atención de las cámaras. Pero el scrunchie está de nuevo por todos lados, cada vez más, en pasarelas y fotos de revista, en las calles, en las cabezas de las celebridades… Es un hecho que volvió.
El scrunchie, este accesorio para el pelo, que va cubierto de tela y que solía existir en infinidad de colores, fue tendencia en los tardíos ochenta, y a fines de los noventa ya se había convertido en un recurso de la facha o la fodonguez: era horrendo, pero algunas insistían en seguirlo usando.
¿Recuerdan aquel capítulo de Sex and the City en que Carrie tiene una discusión con su novio escritor, porque éste coloca un scrunchie en el peinado de una personaje de su novela? Carrie estaba en lo cierto: a fines de los 90, ninguna chica que se mantuviera al tanto de las tendencias de la moda habría usado el accesorio. La serie se encargo de vetarlo, y no la culpo.
Hoy, sin embargo, marcas como Rag & Bone, que presumen de todo el coolness necesario para sobrevivir, muestran looks en que el scrunchie está estratégicamente colocado en el pelo de la modelo, con un acierto inimaginable. No cabe duda que se necesita visión para estilizar fotos de moda.
Con decirles que incluso existe una edición limitada de scrunchies, lanzada por Marc Jacobs. Increíble pero cierto.
Ahora bien, el regreso del pavoroso scrunchie no está tan mal. Será cuestión de afinar el ojo y el instinto, de elegir el peinado adecuado y, sobre todo, tener claro que las tendencias no son para usarse ni todo el tiempo ni con todos los outfits.
Este accesorio luce bien en chongos altos y desaliñados, en coletas a los lados o en pony tales. El error sería usarlo con atuendos demasiado conservadores. Para que el scrunchie funcione, habrá que peinarse al estilo “despeinado”, evitar que el pelo quede impecablemente pegado a la cabeza.
¿Ustedes qué dicen? ¿Listas para usar scrunchies? ¿O definitivamente pasan de la tendencia?