El corto animado por stop motion Save Ralph está estremeciendo al Internet. Y es que lejos de tratarse de una historia de conejitos tiernos que hablan, es una campaña de concientización sobre el uso de animales para experimentación cosmética y otros productos que usamos en nuestro día a día.
Ralph es un conejo amigable cuya vida gira en torno a su papel como probador de productos. A través de un falso documental, nos muestra su día a día, desde que se cepilla los dientes hasta que asiste a los laboratorios de pruebas.
Ralph confiesa que siente un gran en todo su cuerpo pero que al final está acostumbrado y es consciente de que «es por los humanos». Las marcas en su piel y los daños que ha sufrido en sus ojos y oídos han hecho estremecer a todos.
El corto realizado por la Sociedad Protectora de Animales, en colaboración con Arch Model Studiopor, es una crítica conmovedora y desgarradora que muestra la crueldad a la que son sometidos los animales de prueba.
Es momento de tomar en serio el daño que esto provoca y cómo nos afecta a todos.
De acuerdo con la People for the Ethical Treatment of Animals (PETA), más de 100 millones de animales son quemados, lisiados, envenenados y abusados en los laboratorios alrededor del mundo. Los laboratorios que utilizan conejos, ratones, ratas, aves, reptiles y anfibios están exentos de las protecciones mínimas bajo la Ley de Bienestar Animal (AWA).
Israel y la India, dos de los países con mayor producción de cosméticos, ya han prohibido éstas pruebas para su elaboración, así como la venta o importación de productos de belleza que han sido probados en animales.
El impacto ambiental es real.
Por lo general, las instalaciones que realizan pruebas con animales no solo se deshacen de estos, sino que también eliminan productos químicos potencialmente peligrosos utilizados durante el proceso de prueba. Esto tiene un gran impacto en la calidad del agua y el aire.
Según los Institutos Nacionales de Salud (NIH), los desechos de sus instalaciones de experimentación con animales totalizaron 1.5 millones de libras entre 2011 y 2013. En otro caso, un importante laboratorio farmacéutico fue responsable de producir casi 15 toneladas de desechos animales en sólo un año.
¿Es realmente necesario probar en animales?
La gente tiene diferentes opiniones y sentimientos hacia los animales; Algunos los ven como compañeros de vida, mientras que otros como un medio para hacer avanzar las técnicas médicas o promover la investigación experimental.
Hay muchos médicos y organizaciones que han demostrado que no necesitamos animales para la creación de productos. La razón principal por la que comenzó esta práctica aún está en el aire.
La Ley FD&C no requiere específicamente el uso de animales en las pruebas de seguridad de los cosméticos. Sin embargo, la agencia siempre ha aconsejado a los fabricantes de estos productos que empleen cualquier prueba que sea apropiada y efectiva para corroborar la seguridad de estos.
El hecho de que una sustancia química afecte a un animal de alguna manera no significa necesariamente que afectará a los humanos de la misma manera.
Mientras que muchas marcas han encontrado la forma de garantizar la seguridad de sus productos sin recurrir a animales de prueba, aún hay una larga lista de aquellos que siguen recurriendo a estas prácticas.
Los animales tienen derechos básicos de un trato digno y cuando son utilizados para la investigación, estos derechos son violentados.
La Asociación Estadounidense de Medicina Veterinarial afirma que dolor y el sufrimiento al que están sujetos los animales de experimentación no tiene ningún beneficio para los seres humanos.
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