California está siendo pionera en el cultivo de remolacha para convertirla en biocombustible. Estados Unidos está muy interesado en potenciar este particular tipo de energía, es por eso que subvencionará a agricultores de remolacha con cerca de 5 millones de dólares para que experimenten generando biocombustibles con remolacha.
Cerca de un 95% de los biocombustibles de etanol que se generan en las tierras del Tío Sam provienen de plantas de maíz, pero ya llegó la hora de darle la oportunidad a otros cultivos que podrían ser igual de beneficiosos. Eso pensaron doce agricultores del estado de Five Points, California, quienes ahora deberán a sacar resultados positivos si quieren que se construya la planta de biocombustibles de remolacha azucarera más grande del mundo.
Si todo sale bien, la planta se construiría el 2016 y vendría a revolucionar el campo de los biocombustibles de etanol, tal y como lo hizo en Europa donde hoy hay una decena de plantas de remolacha para combustible.
Hace algunos años muchos agricultores norteamericanos perdieron grandes sumas de dinero cuando el precio del azúcar cayó. La utilización de este producto como materia prima energética podría reactivar la economía de muchas granjas que se dedican a este cultivo.
Fuente: California Working On Firs Comercial Biofuel From Beet (POPSCI)
