La Unión Europea (UE) está a punto de prohibir la venta de cosméticos y productos de cuidado personal que hayan sido probados en animales (o contener ingredientes que lo fueron). La normativa entrará en vigor el 11 de marzo y tendrá importantes consecuencias en la industria cosmética mundial.
Llegar a esta prohibición no fue algo sencillo o libre de controversia. El Parlamento Europeo, tras una década de campañas y debates, votó en primera instancia a favor de establecer una legislación que prohibiera la experimentación con animales en 2003 y que debía entrar en efecto en 2009. Bueno, eso no sucedió; la industria cosmética y su lobby surtieron efecto y retrasaron la prohibición hasta 2013. Incluso algunas compañías esperaban un nuevo retraso en la aplicación de la normativa, lo cual, por suerte, no va a ocurrir.
Quienes se oponen a la experimentación con animales, incluyendo al grupo animalista Cruelty Free International, han aclamado la prohibición y la califican de “un verdadero acontecimiento histórico”.
En Estados Unidos no hay leyes que restrinjan o prohiban la experimentación cosmética en animales, de hecho, las compañías que los manufacturan han ejercido un descarnado lobby que les permitió el año pasado derrotar un proyecto de ley impulsado por la Food and Drugs Administration (FDA) que buscaba cierto grado de supervisión sobre los productos de cuidado personal.
Sin embargo, como ahora todas las grandes empresas del rubro deberán detener sus pruebas con animales si quieren vender sus productos en alguno de los 27 países de la UE, es de esperar que las medidas europeas alcancen otros mercados.
Fuente: European Union Bans All Animal Testing of Cosmetics (Jezebel)