“El único fruto del amor es la banana, es la banana” reza la canción que deja en evidencia las bondades del plátano. Es una buena fuente de carbohidratos y fibra, riquísimo en nutrientes, especialmente potasio, vitamina B6 y ácido fólico. No tiene grasa, colesterol ni sodio.
Su industria fue tan potente que muchos países de centro América quedaron prácticamente bajo la tutela de la United Fruit Company y aunque ésta desapareció, las grandes corporaciones siempre se han mantenido atentos a su producción.
El plátano es oriundo de Asia y hoy es la fruta más cultivada y comercializada en el mundo en un proceso de domesticación que lleva unos siete mil años. Obviamente mediante la experimentación genética se ha conseguido que la mitad del volumen de este fruto no posea semillas y por lo mismo no pueda reproducirse sexualmente, lo que lo hace más vulnerable a hongos y parásitos.
Es por eso que los científicos estaban detrás de la identificación de su genoma, llegando a él y descubriendo que posee 36.500 genes , es decir, 14.000 más que los seres humanos, según anunciaron los investigadores en la revista Nature. ¿Pero para qué sirve esto?
Cuando ya se le ha echado mano a la naturaleza, se cae en un círculo del cual es difícil salir. Es por eso que se continuó investigando a la banana para continuar modificándola genéticamente, ahora teniendo el conocimiento de su genoma, para mejorarla y hacerla resistente a estas plagas.
La secuenciación del genoma de permitirá, identificar los genes responsables de características clave como la calidad de la fruta y la resistencia a los pesticidas. Esto se basa en diez años de trabajo, que se proyecta en el desarrollo de variedades nuevas y más resistentes del fruto.
Fuente: Secuencian el genoma del plátano (Muy Interesante)
