La odiosidad que existe en Europa hacia la multinacional de semillas transgénicas Monsanto no es un secreto para nadie. La dudosa calidad de sus productos y la entrada medio “a la fuerza” que ha tenido en los campos de millones de agricultores son solo algunas de las razones de su mala fama. El nombre de la empresa no tiene para cuando limpiarse menos ahora que fue encontrado culpable, en segunda instancia de la demanda que hace unos meses ya había ganado un agricultor francés que aseguró intoxicarse por culpa de Monsanto.
Este lunes el Tribunal de Gran instancia de Lyon condenó a la empresa Monsanto por la intoxicación del agricultor francés de 47 años, Paul Françoise. Hace un par de meses la empresa fue condenada por los tribunales franceses, pero Monsanto decidió apelar ante el Gran Tribunal de Lyon, sin éxito.
El trabajador de cereales (Charentes) habría inhalado, durante sus faenas en el año 2004, el pesticida Lasso, el cual le provoco daños importantes a su salud como: tartamudeos, vómitos, dolor de cabeza, nauseas y problemas musculares que lo dejaron sin poder trabajar durante un año. Los doctores mediante exámenes comprobaron que en su organismo había residuos de manoclorobenzeno un componente químico presente en casi un 50% del agroquímico Lasso y que puede provocar severos daños a la salud como ocurrió con Paul.
Tras demandar a Monsanto Paul Françoise se convirtió en la cara visible de todos los agricultores que sufren por los pesticidas en los campos, los cuales también pueden afectar a sus familias y futuros hijos. Es por eso que todas las miradas de la opinión pública estaban muy atentas a los resultados de la demanda que finalmente dio la razón al trabajador de la tierra.
El abogado de trabajador afectado, Françoise Lafforgue, se mostró conforme con el fallo, pero también reprochó que la empresa transnacional de ingeniería genética “ha hecho de todo para dejar a Lasso en el mercado”, siendo que ya en los años ochenta fue prohibido en Canadá y el Reino Unido.
Desde el año 2007 y tras el escándalo del agricultor intoxicado Lasso ya no se utiliza más en Francia, sin embargo es muy posible que aun se siga utilizando en otras naciones que son menos rigurosas a la hora de fiscalizar los campos.
Los abogados de Monsanto alegaron en su defensa que no están comprobados los efectos negativos de Lasso, ya que el agricultor, habría presentado los síntomas después de meses de haber inhalado el producto, sin embargo los tribunales hicieron su propia investigación medica y los doctores reconocieron que era muy posible enfermarse si se estaba expuesto a este tipo de químicos, más aun si los agricultores no están obligados a llevar mascarilla.
Fuente: Monsanto declarado culpable por primera vez en Francia (Tercera información)
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