El Rey Felipe VI y la reina Letizia empezaron el 2024 con mal pie tras finalizar el 2023 envueltos en rumores de infidelidad por parte de la monarca con su ex cuñado, Jaime del Burgo, situación que ha comenzado a pasar factura en el matrimonio, según medios internacionales.
Si bien los reyes han aparecido en algunos eventos públicos, la tensión entre ellos se ha podido notar, al punto de no mostrarse cercanos y esquivarse las miradas. Es por ello que se ha especulado sobre un posible divorcio en puerta.
Por varios años se ha especulado sobre un falso amor entre la reina por su esposo, por lo que estiman que se casó motivada por la sed de poder y han recordado los rumores que aparecieron en 2013 cuando aseguraban que habían acuerdos para llevar a cabo el fin de su matrimonio.
Las condiciones del divorcio entre Letizia y Felipe VI
Según Jaime del Burgo, Letizia confesó que ambos estaban juntos cuando ella inició su romance con el rey pero decidió sacrificar su relación para convertirse en reina y hasta habría confesado que se casó por ambición.
Pese a ello la pareja decidió continuar adelante con su relación, aparentando normalidad ante el público mientras gestionaban su situación de puertas para adentro.
Letizia consciente del impacto negativo que un divorcio tendría en la imagen de la corona, optó por pagar el precio necesario para continuar siendo reina. Mantener a sus hijas cerca y garantizar el futuro de Leonor fueron aspectos cruciales en la negociación.
La ambición y la determinación de Letizia han sido, según las revelaciones del mencionado medio español, las fuerzas impulsoras detrás de la estabilidad del matrimonio real español. La reina está dispuesta a todo por la corona, incluso si eso significa renunciar a su vida personal.
Los términos de su divorcio se llevaron a cabo antes de llegar al altar y aunque no se conoce con exactitud los términos, Letizia Letizia recibiría una gran suma de dinero si llegan a divorciarse, además, de algunas propiedades, como 2 casas, una de invierno y otra de verano; también una paga vitalicia.
Con respecto a sus hijas, quedarían bajo el mano de su padre, aunque no le niega poder verlas y frecuentar con ellas. Hasta ahora, la situación quedaría únicamente dirigida a Sofía, pues Leonor ya alcanzó su mayoría de edad.
Su título de reina lo perdería, una vez llegase a firmar el divorcio, situación, que difícilmente estaría dispuesta a perder. Hasta ahora nada de las noticias han sido confirmadas y se manejan solo especulaciones.
