La promesa de amor para siempre al parecer solo quedará en palabras entre los actores Gabriel Soto e Irina Baeva, quienes cada vez más dan señales de que oficializar su separación será cuestión de poco tiempo.
Ni él, ni ella presumen su amor en las redes sociales de cada uno como solían hacerlo casi a diario en Instagram. Gabriel ahora en un hombre de amigos, colegas y sus hijas. Su feed releja a un hombre soltero que está disfrutando de su carrera y su familia. Ante esto, Irina solo se ha limitado a darle “Me gusta” a sus posts.
El 30 de abril fue la última vez que él se atrevió a compartir una foto juntos. Se trató de una entrevista que ofrecieron a la revista ¡Hola! sobre todo lo relacionado a la cancelación de su boda, siendo esta la tercera vez.
Ella, en tanto, fue un poco más allá y mostró “su amor” hasta el 5 de julio, con una imagen de ambos durante la celebración de un proyecto de NFTs que llevan juntos y apoyan causas benéficas. Las otras publicaciones hechas pocos meses atrás, eran parte de publicidades.
Pese a que ambos hacen un esfuerzo por mantener las apariencias, ninguno de los dos ha publicado una imagen en la que se digan cuánto se extrañan y aman. Ni tampoco parecen hacer el mínimo esfuerzo para verse las caras.
Desmiente, pero nadie cree
La actriz de 29 años descartó esta semana que su relación haya terminado. En una intervención con los medios afirmó que están muy bien y que el distanciamiento no se debe a que el amor murió, sino a los múltiples compromisos que los dos tienen.
Al ser consultada sobre su ruptura ella respondió: “¡Ay no es cierto! Ustedes han platicado mucho con él ya sobre esto, nosotros siempre lo decimos, pero de verdad no sé por qué la gente no nos cree. Estamos bien, todo en orden”.
Explicó que no han estado juntos porque “Gabriel efectivamente está grabando muchísimo, está preparando este nuevo proyecto y yo ahorita me voy a Catar, y la verdad no hemos podido compartir mucho por cuestiones de trabajo, pero todo está bien como cualquier pareja.
Afirmó que siguen los planes de boda porque todo “está ok y perfecto”; sin embargo, no indicó para cuándo podría realizarse la boda tan esperada. Y descartó que tuviera una relación con el productor de Hollywood, Britt George: “Los rumos son rumores, ya sabemos que dicen muchas cosas (…) Nada que ver (con él) saben que es un compañero de escuela donde tome un curso de actual. No tiene nada que ver con la realidad (las especulaciones). Es un absurdo”.
¿La cuarta será la vencida?
La pareja que lleva cuatro años de relación y que presumía por doquier su amor, se comprometió en matrimonio el 25 de octubre de 2020, pero el matrimonio ha sido cancelado en tres oportunidades. La primera ocasión fue por la pandemia por la Covid-19, ya que los familiares de ambos no podían asistir al evento.
Luego, fue el estallido de la guerra entre Ucrania y Rusia, país de donde proviene la actriz, que impidió que sus padres estuvieran presentes. Y finalmente, ambos consiguieron propuestas de trabajo que los mantienen alejado y no les ha puesto cuesta arriba compartir y decir: “Sí, acepto”.
Son muchas las trabas que ha sufrido este compromiso, ¿será que no les conviene? ¿será que ellos ya no se aman y cualquier excusa es buena para no afrontar lo inevitable? Ya el tiempo le dará la razón a quien la tenga.