Si bien es meritorio el trabajo que Verónica Alcocer ha hecho en territorios vulnerables, la forma en cómo lo comunica debe cambiar. Ya la habían criticado por posar de “salvadora blanca” al posar con una niña afrocolombiana, pero ahora en video, mostró, al lado de la esposa de Quintero Calle, la misma condescendencia con un grupo de indígenas.
Si bien visitan una misión donde acogen a este grupo vulnerable, sobre todo, siempre explotado en las calles de Medellín, esta era la parte más importante de la historia. Pero decir que estas comunidades (que desde hace siglos han sido oprimidas precisamente por el Catolicismo, que mató a tantísima gente suya en nombre de Dios) pueden salir adelante a través de la Virgen María y Jesús, es totalmente problemático.
Sería bueno que la Primera Dama aprendiese algunas lecciones de su hija Sofía, que no se muestra en el centro del relato. Sería bueno también que diera voz a estas comunidades y que se contara mejor lo que hace esta misión en particular, pero no centrándose como protagonista.
Y sería bueno tratarles de forma cero paternalista, para variar. Así, de paso, la dejarían de comparar con una Lady Di wannabe en términos nada amables.
“No aprende”
La gente, claramente, en Instagram ha sido amable, pero en Twitter no se calla. Le han dicho racista, colonialista y que en serio debería aprender a comunicar mejor sus acciones.
“Basta, por favor. Alguien que le diga que esto es una cagada monumental. No puede ser que siga esa narrativa de Salvadora blanca, basta ya, carajo. Si quieren asesores en comunicación, avisen y enviamos CV, porque no joda!!!”, le han dicho. Hasta la misma Lido Pimienta le dijo: “NO”, criticando esta clara acción colonialista.
Otros también critican que Diana Osorio haya “metido la mano” en este ámbito, sobre todo a la hora de posar como “salvadoras blancas”.
Es hora de dejar esa narrativa tan racista y condescendiente y mostrar el trabajo de otra manera.