Siempre he tenido más sintonía con el día de la mujer que con el de la madre. Quizás tenga que ver con mi biografía personal. Mi mamá era una pésima mamá a la hora de amasar galletas en las tardes, pero se convertía en mi heroína cuando me llevaba a mi y mis hermanas a las marchas feministas del 8 de marzo, nos enseñaba que hombres y mujeres éramos iguales y que Eva jamás debió ser expulsada del Paraíso.
Todo eso ocurría a fines de los 70s y principios de los 80s, una época en que las mujeres pataleaban por sus derechos y la figura de la maternidad estaba asociada a un modelo de sociedad burguesa, conservadora y machista. En el mundo del comic, las chicas se dividían en Mafalda versus Susanita. Y yo era claramente más Mafalda.
Hoy ser mamá y por consecuencia más Susanita, es casi cool. Basta ver a Angelina Jolie y su jardín infantil. Todas mis amigas están, estuvieron o planean quedar embarazadas. Sin ir tan lejos, en sólo 3 años yo misma he sido mamá dos veces.
Ahora que tengo dos hijos supongo que debería dejar de hacerme tantas preguntas y celebrar como todo el mundo el día de la madre. No tiene nada de malo juntarse en familia y subirse el ánimo mutuamente por ejercer bien o mal una de las profesiones más sacrificadas del mundo. Lo que me enerva no es eso, sino el marketing que los acompaña; los catálogos Ripley o Falabella, esas cocinas relucientes habitadas por mamás de cara lavada -cuando la maternidad es todo menos una cara lavada-, y un Miguel Bosé en versión blanco y negro alabando la naturaleza femenina como si se tratara de un vino en reserva. ¿Por qué nadie nos recuerda que la tasa de natalidad en Chile ha caído de 3,5 por mujer fértil a 1,9?
A esa misma sociedad que este domingo me quiere celebrar, le exijo medidas reales para facilitar y promover nuestra tan querida maternidad durante el resto del año. No hablo a nombre de las madres, sino de las no -madres, mujeres que quieren serlo y por distintas circunstancias y accidentes no lo son. Acá va mi listado Falabella:
1) Abrir bancos de espermios en Chile accesible a la población y de un costo moderado.
2) Acceso gratuito o cubierto en alguna parte por la Isapre a los diversos métodos de fertilización.
3) In Vitro para todos y con posibilidad de varios intentos.
Si el día de la mujer se creó con el objetivo de revindicar las deudas hacia la mujer ¿nos es justo que el día de la madre haga lo mismo?