El 30 de diciembre entró en vigor en Argentina la Ley de Despenalización del Aborto. Este tema, había sido puesto sobre la mesa varias veces y presentaba varias divisiones.
PUBLICIDAD
Por un lado, se encontraban aquellas personas que defendían la Ley acérrimamente y por otro, las que insistían en «el derecho a las dos vidas».
Netflix, incorporó recientemente a su plataforma la película Fragmentos de una mujer. Esta, trata sobre una pareja que decide que ella tenga un parto natural, en su casa, y por una neglicencia de la comadrona, la bebé muere apenas ha nacido.
Producida por Martin Scorsese, dirigida por Kornél Mundruczó y protagonizada por Vanessa Kirby, Shia LaBeouf, el filme retrata el duelo que viven tras la pérdida en unos meses.
Kirbi, interpreta a Martha, la mujer que ve morir a su bebé y además de tener que lidiar con su dolor, es cuestionada por su decisión de querer tener a su hija en su vivienda, o sea, su derecho a elección, que es lo que defiende la Ley del aborto en Argentina.
La película muestra a una madre destrozada, juzgada y vilipendiada, camino hacia la autodestrucción.
Asimismo, retrata el dolor de Sean, su novio, quien lleva el duelo de diferente manera, y los dos caminan como las polillas hasta la luz, avocándose una inevitable ruptura.
PUBLICIDAD
Lena Dunham fue cuestionada en la última temporada de Girls, al quedarse embarazada y decidir tener al bebé.
Para muchas feministas, que abortase era la oportunidad de demostrar su empoderamiento, pero Dunham fue muy inteligente al decidir tener al niño, porque de eso se trata, del derecho de la mujer a escoger, del derecho a tener o no un bebé, del derecho a organizar un parto casero y no ser dilapidada porque salga mal y a no decantarse por buscar cabezas de turcos para anestesiar tu desolación.
Fragmentos de una mujer la madre es un ser aniquilado por uno de los sucesos más trágicos de su vida, pero además, es la decisión de una mujer, no solo a cómo tener el parto, sino como a gestionar su tristeza y a elegir si quiere o no buscar culpables.
La película, huele a Óscar, por la magnífica dirección y por la magistral actuación de Kirby.