En un mundo donde la representación femenina en los negocios aún es una lucha constante, Ana Victoria García, CEO y fundadora de Victoria147, ha construido un espacio de crecimiento y comunidad para mujeres emprendedoras. Su misión es clara: impulsar el talento femenino y cerrar la brecha de género en el mundo empresarial. A través de Victoria147 y su evento insignia, Victoria Fest, ha transformado el concepto de emprendimiento en un movimiento de empoderamiento y sororidad.
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Rompiendo barreras con propósito
“Victoria nació hace 13 años cuando me di cuenta de la falta de representación femenina en el mundo de los negocios. Sólo el 19% de los emprendimientos formales son liderados por mujeres, a pesar de que el 52% de los graduados universitarios son mujeres. Es un talento invaluable que se está desperdiciando. Con esta reflexión, creé Victoria147, con el propósito de unir a las mujeres y aumentar su representación en el ámbito empresarial”, detalló Ana Victoria.
Desde entonces, su propósito ha sido claro: reunir y fortalecer a las mujeres emprendedoras desde una perspectiva holística, que no sólo impulse sus negocios, sino que también las ayude a crecer como personas.
Victoria147 nació con la visión de crear un ecosistema donde las mujeres puedan emprender desde la conciencia, entendiendo que el éxito empresarial no está peleado con el bienestar personal. “Siempre hemos hecho tribu. Nosotras crecemos en comunidad”, afirmó Ana Victoria, resaltando el poder de la conexión femenina en el mundo de los negocios.
Victoria Fest: un espacio de inspiración y crecimiento
El impacto de Victoria147 en el emprendimiento femenino se refleja claramente en el Victoria Fest, un evento diseñado para inspirar, conectar y empoderar a las mujeres emprendedoras. Con una agenda repleta de actividades transformadoras, el festival ofrece un espacio único para el crecimiento personal y profesional.
“Victoria Fest nace con la idea de reunir a emprendedoras en un solo día para vivir la filosofía integral de Victoria147: empresas basadas en la conciencia y el impacto positivo”, señaló Ana Victria. Y es que, más que un evento, ella lo describe como una experiencia transformadora donde las emprendedoras pueden aprender, conectar y visualizar el futuro de sus negocios. Con una agenda diversa que incluye conferencias, talleres, paneles y networking, este festival se ha convertido en el epicentro del emprendimiento femenino en México.
Desde la Carpa de Negocios Conscientes, donde se debaten temas como el futuro del consumo, la tecnología y la salud mental en el emprendimiento, hasta la Carpa Roja, un espacio de conexión profunda basado en las antiguas tradiciones femeninas de sabiduría y autocuidado, el evento ofrece una experiencia integral para cada asistente. Además, el Mundo Victoria fomenta el networking a través de actividades como Speed Mentoring y la Carpa Premium, donde las emprendedoras pueden acceder a mentorías exclusivas con líderes de la industria.
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Liderazgo que inspira
Respecto a los retos que enfrentan las mujeres en el mundo del emprendimiento, Ana Victoria señaló un obstáculo clave: la duda. “Nosotras queremos estar 95% preparadas antes de asumir un reto, mientras que los hombres se sienten listos con un 68%”, comentó. Este miedo a la incertidumbre frena a muchas mujeres, y su mensaje es claro: hay que confiar en nuestras capacidades y dar el paso aunque no tengamos todas las respuestas.
Su liderazgo se define por la visión, la exigencia y la curiosidad. “Me gusta imaginar el futuro y rodearme de personas con potencial para crecer juntas”, dijo. Sin embargo, también enfatizó la importancia del disfrute en el proceso. “A veces creemos que el trabajo tiene que ser difícil y agotador para ser valioso, pero también podemos gozar el reto, reírnos de nuestros errores y encontrar placer en lo que hacemos”.
Ana Victoria no sólo ha construido una plataforma para el éxito de las mujeres emprendedoras, sino que también ha redefinido lo que significa liderar con propósito. Con Victoria147 y Victoria Fest, ha demostrado que el futuro de los negocios es femenino, consciente y colaborativo. Su mensaje es claro: la clave para crear el futuro es imaginarlo en el presente. Y en ese presente, las mujeres tienen el poder de transformar el mundo.
