Mover la pierna incesantemente puede resultar un tanto estresante para que quienes están alrededor de esa persona. Sin embargo, muchas veces se trata de un movimiento repetitivo e involuntario que está asociado a ciertas conductas. Esto suele ocurrir con mayor frecuencia cuando se está sentada o acostada.
PUBLICIDAD
Se trata del Síndrome de las piernas Inquietas (SPI), que afecta tanto mujeres como a hombres que aparece después de los 20 años, aproximadamente y afecta hasta el 15% entre la población general, según un artículo especializado publicado por Elsevier.
En que consiste el SPI
De acuerdo con el National Institute Heath, este síndrome es básicamente la necesidad imperiosa de mover constantemente las piernas, especialmente por la tarde o la noche, para aliviar la sensación de incomodidad que se genera en las extremidades.
“Es causado por problemas con la forma en que los nervios del cerebro y el cuerpo se comunican entre sí. Estos problemas ocasionan una fuerte, a veces abrumadora, necesidad de mover las piernas. Este impulso a menudo viene acompañado de sensaciones desagradables como hormigueo, ardor o palpitaciones”, acotó la publicación.
La causa detrás del movimiento incesante
Hasta ahora no hay una causa exacta sobre por qué se genera, pero los expertos han señalado que puede deberse a la forma en cómo las células del cerebro utilizan la dopamina, que es el químico cerebral que ayuda al movimiento muscular.
Aunque han notado que tiene relación con personas que padecen de enfermedades renal crónica, diabetes, deficiencia de hierro, de magnesio o de ácido fólico; anemia, Parkinson, tienen una neuropatía periférica o están embarazadas.
Medline Plus acotó cuáles son algunos de los síntomas que van más allá del movimiento de las piernas y que resultan desagradables. Quienes padecen de SPI puede sentir un tirón, ardor, hormigueo, palpitaciones, dolores, molestias, picazón o punciones. Que suelen incrementarse durante la noche cuando la persona está acostada, por lo que el paciente también tiene problemas para conciliar el sueño.
PUBLICIDAD
Cómo se alivia la pierna inquieta
Pues, las molestias ceden cuando se comienza a mover la pierna o se camina, pero es necesario acudir al médico cuando estas sensaciones ya impidan tener un sueño reparador, por lo que afecta el desempeño durante el día y afecta la calidad de vida.
A veces, los síntomas del síndrome de las piernas inquietas desaparecen después de tratar una afección subyacente, como la deficiencia de hierro. Corregir una deficiencia de hierro puede consistir en tomar un suplemento de hierro por vía oral