Una postura común al dormir es mantener las muñecas dobladas o los puños apretados, gestos que a simple vista podrían parecer inofensivos pero que pueden revelar potenciales problemas de salud en nuestro organismo.
Es importante consultar con un profesional de la salud si experimentamos síntomas como los descritos para recibir un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado que preserve nuestra salud.
¿Qué significa dormir con las muñecas dobladas?
La postura conocida como postura flexora de muñeca desde el punto de vista clínico, puede estar asociada a condiciones médicas como el síndrome del túnel carpiano y otras neuropatías, según los expertos.
Este hábito, aunque inconsciente en la mayoría de los casos, puede ser una señal de compresión en los nervios medianos de las muñecas, lo cual puede desencadenar serias complicaciones a largo plazo.
Dormir con las muñecas flexionadas, ya sea hacia adentro o hacia afuera, puede provocar síntomas como hormigueo, entumecimiento y dolor nocturno, que incluso puede obstruir el sueño. Si estos síntomas se acompañan de sensaciones de pinchazos en los dedos o dificultades para manipular objetos al levantarse por la mañana, podría ser un indicio de una enfermedad subyacente.
El síndrome del túnel carpiano es una de las razones más frecuentes detrás de adoptar esta postura al dormir, ya que la compresión del nervio mediano en la muñeca tiende a agravarse durante las horas de descanso.
Adicionalmente al síndrome del túnel carpiano, una postura inadecuada al dormir y el uso de almohadas que no brindan un soporte adecuado también pueden contribuir a adoptar posiciones incómodas para las muñecas.
La falta de un soporte adecuado puede llevarnos inconscientemente a buscar posturas que, lejos de ser ergonómicas, terminen afectando nuestra salud. El estrés acumulado y la tensión emocional pueden manifestarse durante el sueño, llevándonos a adoptar posiciones poco usuales como un mecanismo de protección.
