La infidelidad es una de las causantes de rupturas en las parejas que optaron por una relación cerrada. Es una traición a la confianza dada, que suele ocurrir, por lo general, se da como parte de un proceso complejo en la que influyen múltiples factores, como los sexuales, familiares, sociales e individuales y que terminan, en la mayoría de los casos por socavar el acuerdo de exclusividad que los unía.
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Una investigación realizada por Facultad de Psicología, Universidad Nacional Autónoma de México, sostiene que hay dos tipos de infidelidades: la sexual y la emocional. Por supuesto, que la primera tiene que ver con el sexo con alguien que no es la pareja, mientras que la otra es cuando se siente algún tipo de afecto intenso por otra persona.
Además, aclara que los motivos dependerán de si es hombre o mujer, puesto en las chicas suelen engañar para “buscar mayor excitación sexual, desear más sexo. La mujer desea sentirse especial, admirada, deseada, hermosa, capturar la atención; desea tener una relación íntima, emocional y romántica con la otra persona o busca vengarse de su esposo por múltiples razones”.
Mientras que los hombres, “con frecuencia desean mayor excitación; una necesidad biológica; deseo por poseer a la mujer con furia o quiere alguien siempre nuevo”. Lo cierto, es que esta conducta termina por causar dolor en el otro con quien se estableció el convenio.
Escenarios que darían pie a una infidelidad
La casa de estudios mexicana enumeró algunas de las situaciones en las que los hombres son más propensos a caer en la tentación si:
- Están cercano o son interdependiente de alguien que no sea la esposa.
- Están cerca de alguien en quien se está sexualmente interesado(a).
- Emplean mucho tiempo en una relación de uno a uno con alguien.
- No se sienten cercano o conectado con la esposa o pareja.
- Están en una situación que ofrece la oportunidad.
- Están en situaciones que involucran alcohol o drogas.
¿Hay una forma de descubrir cuándo tu pareja es infiel?
Aunque somos distintos, siempre hay ciertos indicadores que poner en evidencia el engaño, tales como: un ser excesivamente cariñoso, más de lo normal, pues desea desviar la atención para que no sospeches la traición. Otra señal es lo contrario, que está muy distante, no le “provoca” un encuentro contigo. Una tercera bandera roja son los incrementos de las actividades sociales, como reuniones con sus amigos o de trabajo, pese a que antes era un ermitaño.
También suele voltear la tostada; es decir, que te acusa de que eres tú quien está siendo infiel, esa es la forma en la que se proyecta psicológicamente en ti. Finalmente, también tiene un apego desproporcionado y extraño hacia el celular y las redes sociales o de comunicación. Es importante que sepas, que si tu pareja está teniendo alguno de estos comportamiento lo más sensato es abordar el tema de manera constructiva y buscar la ayuda adecuada.
