Ana María, una niña de 9 años, es de padres de clase alta que le regalan todo lo que ella pida. No es capaz de compartir con otros niños, vive de las apariencias y en fechas como la Navidad es inundada de regalos.
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Verónica es la pequeña hija de la señora de servicio de los padres de Ana María, a diferencia de ella quizás reciba un solo regalo o tal vez no, todo depende de lo que produce su madre que con mucho sacrificio trabaja de sol a sol.
Ambas niñas tienen la ilusión de la llegada de Santa Claus, pero cada una de ellas tiene un valor distinto por lo que reciben y es allí donde los padres deben reflexionar y enseñarle a sus hijos a valorar cada detalle.
La Navidad y el Día de Reyes son fechas especiales y ansiadas para los más pequeños de la casa, pues está llena de sorpresas y regalos. Pero también es el dolor de cabeza de los padres para costear todo lo que pidan sus hijos.
En una era donde el consumismo a menudo domina las fiestas, algunos progenitores se preguntan: ¿Cuántos regalos deben recibir realmente sus hijos?
Para mucho es tentador colmarlos de una montaña de juguetes y regalos, pero los expertos sugieren que la moderación y el equilibrio son clave para un desarrollo infantil saludable.
Cuántos regalos son demasiados para los niños
Según los expertos que los niños reciban un exceso de juguetes pueden causarles un desorden emocional y cognitivo.
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Los pequeños pueden tener dificultades para concentrarse en un solo juguete o actividad, afectando su capacidad para valorar y disfrutar de lo que ya tienen.
Limitar el número de regalos puede ser benéfico para los niños. No solo les ayuda a apreciar más lo que reciben, sino también les enseña sobre el valor de las cosas y la gratitud.
La Regla de los cuatro regalos
Según la psicóloga venezolana, Sandra Chafloque Chávez, psicoterapeuta y docente de la Escuela de Psicología de la UCV Piura, considera que debemos medir la cantidad de regalos que ofrecemos a los niños de la casa.
“Toda la familia compite por hacer al niño feliz. Al final, los niños se juntan con el regalo de la tía, del tío, de los abuelos, de la madrina, y resulta que reciben tantos juguetes, que no son capaces de pasar más de un día seguido con uno de ellos. La solución para evitar esta situación, es la llamada regla de los cuatro regalos de Navidad” afirma.
Indica que la regla de los cuatro regalos navideños es bien sencilla. Consiste en seleccionar solo cuatro cosas, basándose siempre en estos cuatro principios:
- Algo que sirva para vestir (ropa, zapatos, accesorios).
- Algo para leer.
- Algo que los niños realmente deseen.
- Algo que realmente necesiten.
Beneficios de dar menos regalos
Cuando los niños tienen menos opciones, tienden a encontrar más formas de jugar con lo que tienen. Eso también les ayuda a desarrollar habilidades para resolver problemas.
Para saber cómo elegir la cantidad adecuada de regalos debes tomar en cuenta los intereses y necesidades de tu hijo. Observa cómo juega y qué tipo de juguetes captan su interés durante más tiempo.
La especialista, señala que la mayoría de los niños reciben más regalos de los que necesitan y de los que quieren en navidad. La consecuencia de esto es que no valoran lo que reciben, están sobre estimulados y no desarrollan la creatividad.
“Si reciben todo lo que piden promovemos que se desarrollen inmaduros y que sean insaciables y siempre estén insatisfechos. Debemos apostar por la calidad en los regalos navideños frente a la cantidad, un auténtico desafío cuando se trata de niños. Porque ellos, evidentemente, sienten un afán desenfrenado por tenerlo todo, y si es posible, ya, en este mismo momento” acotó.
Es clave enseñarles a tus hijos sobre moderación y consumo responsable desde una edad temprana. Habla con ellos sobre la importancia de dar y recibir, y establecer límites claros en cuanto a regalos.
Consejos para dar obsequios de forma responsable
Chafloque considera oportuna la Navidad para enseñar a nuestros niños y educar con el ejemplo, y precisa las siguientes pautas que impactarán positivamente en su formación:
- Enseñar a los niños a valorar sus regalos: Enseñemos a nuestros hijos a huir de las compras compulsivas y a valorar las pequeñas cosas que tenemos y que nos regalan.
- Hablar con la familia para no regalar un exceso de obsequios.
- Dar ejemplo: Si tú sueles caer en comprar de forma compulsiva de cosas que luego no utilizas, tus hijos van a aprender de tus actos y los tomarán como referencia.
- Participar en un acto solidario: Durante la Navidad, se organizan múltiples actividades solidarias en las que pueden participar en familia. Pueden buscar los juguetes y ropa que ya no usen y destinarlos a niños que realmente necesiten.
- Preparar regalos con los niños: Propón a tus hijos hacer regalos emocionales para sorprender a la familia en esta Navidad. Se trata de pequeños detalles, hechos a mano, que los niños pueden regalar a los seres queridos. Esto les ayudará a darse cuenta de que no hay que gastar mucho dinero para sorprender a alguien con algo bonito.
