Cada 3 de mayo se conmemora el Día Mundial del Asma, una enfermedad crónica caracterizada por ataques recurrentes de falta de aire y sibilancias (un sonido chillón durante la respiración), la cual, no siempre es diagnosticada de manera oportuna.
Y es que en México se estima que solo “el 80% de los adultos que tienen esta afección manifestaron síntomas desde los primeros cinco años de vida”, según la Secretaría de Salud.
¿Cómo se puede reconocer cuando alguien tiene asma?
En Nueva Mujer platicamos con la Dra. Elsy Navarrete, Médico con especialidad en alergología e inmunología pediátrica para saber más sobre el diagnóstico oportuno de esta enfermedad.
De acuerdo con la Dra., que labora actualmente en el Hospital Infantil de México Federico Gómez como Médico Especialista adscrita al Servicio de Alergia e Inmunología Clínica Pediátrica, “existen cuatro síntomas cardinales que permiten detectar el asma”.
Pueden pasar 10 años desde que a un paciente le inician los síntomas hasta que le den un diagnóstico; sin embargo, en ocasiones se tiende a confundir el asma con otras enfermedades.
La Dra. Recomienda acudir con un alergólogo o neumólogo, aunque asegura que no todos los niños van a requerir ir al especialista, sobretodo, cuando se trata de asma de primer nivel, sin embargo, en caso de no responder de forma positiva al tratamiento será necesario acudir con los especialistas antes mencionados.
El 80% de los pacientes que empezaron con este problema es al rededor de los 10 años y, conforme pasa el tiempo, los síntomas persisten y en algunos se van aminorando. “Una característica del asma es los síntomas siempre cambian”, expone la Dra. Navarrete.
Existe un factor de riesgo en aquellos menores que tienen familiares con este diagnóstico, es decir, “que sus padres tengan asma les da del 25% al 50% de probabilidad de padecerla, aunado a esto, características en el ambiente que pueden provocar irritación como la contaminación”.
¿Cuál es el tratamiento para las personas diagnosticadas con asma?
La Dra. Mencionó que existen dos grupos de medicamentos que pueden ser de rescate, es decir, que si los aplicas momentáneamente en cinco minutos te sentirás perfectamente, pero tienen una eficacia de hasta ocho horas y solo alivian crisis y no atacan el problema de raíz.
El asma se da por la inflamación de las vías respiratorias como efecto de una respuesta del sistema inmune a agentes externos y provoca que los niños sean muy susceptibles de reaccionar a cualquier cosa factor del ambiente.
Mientras que, el otro tipo de tratamiento, que los especialistas llaman controlado es antiinflamatorio y se debe realizar durante un tiempo prolongado e involucra esteroides inhalados.
Sin embargo, a pesar de estas alternativas, lo más común es que el paciente se automedique con un tratamiento de rescate, pero se busca que acuda al médico para que le brinde un tratamiento continuo o de acuerdo a sus síntomas, ya que normalizan vivir con los malestares y utilizan el inhalador para salir del problema de forma inmediata.
Conforme pasa el tiempo, las vías respiratorias inflamadas tienden a cambiar su conformación, según la Dra. Navarrete “le llama remodelación y se trata de algo parecido a cuando tienes una lesión en tu mano y la estuvieras lastimando constantemente, porque llega a un punto en el que se forma un callo” y eso mismo puede pasar en los bronquios.
Tras pasar mucho tiempo inflamados, existe un cambio en estos y los medicamentos ya no actúan de forma eficaz y se complica el problema, por ello, lo ideal es diagnosticarse a edades lo más tempranas posible.