El dolor de cabeza de todos, especialmente las mujeres, es envejecer y con ello la aparición de la canas. Es algo casi inevitable, a no ser que la genética actúe en tu favor.
El pelo se vuelve gris o con canas a medida que envejecemos por un proceso biológico en el que influyen distintos factores, como genes, proteínas y enzimas.
Según los expertos, el color del cabello lo determinan dos tipos de células madre: las encargadas de orquestar el desarrollo de los folículos pilosos -parte de la piel de donde sale el cabello- y las células madre que determinan el color del cabello, conocidas como melanocitos.
La muerte de los melanocitos es cabello gris
En nuestro cuero cabelludo hay aproximadamente 100.000 folículos de los que sale el pelo. En cada folículo hay melanocitos que contienen únicamente dos pigmentos: melanina (oscuro) y feomelanina (claro).
La combinación de ambos salen todos los posibles tonos de color. Una vez nace un pelo de un folículo, el color está fijo y no se puede volver blanco, reseña el portal Muy Saludable.
Cuando mueren los melanocitos en el folículo el pelo nace sin pigmento, de color totalmente blanco. Eso es una cana.
El pelo blanco puede aparecer a cualquier edad, pero es más común a partir de los 35 años en los hombres, e incluso antes en las mujeres.
Causas de la aparición de canas
La aparición de canas puede tener distintos orígenes, entre ellos está:
- Genéticos: la raza determina en parte la edad a la que aparecen las canas, que está alrededor de los 30 años en las personas blancas, 40 en asiáticas y 45 en africanas.
- Estrés, que altera el funcionamiento del metabolismo y las hormonas, afectando a la producción de melanina.
- Deficiencias en la dieta: la falta de proteínas en la dieta y las deficiencias en micronutrientes, especialmente las vitaminas B, especialmente la B12, vitamina D y vitamina E, los bajos niveles de hierro, cobre, zinc y calcio en sangre pueden acelerar la muerte de los melanocitos.
- Enfermedades: vitíligo (patología cutánea de despigmentación de la piel, los ojos, las mucosas…), déficit de vitaminas u otros antioxidantes, como hierro, cobre o zinc; hipotiroidismo (disminución de la función de la glándula tiroides) o la extraña patología de síndrome de Werner, caracterizada por envejecimiento acelerado.
- Productos o agentes químicos, como tintes o el abuso o mal uso de secador o plancha. El peróxido de hidrógeno que se emplea para decolorar el pelo ataca a los melanocitos del folículo y puede acelerar la aparición de las canas.
- El consumo de tabaco, los fumadores tienen cuatro veces más probabilidades de canicie o ciertos medicamentos.
- Mala higiene del cabello o el uso de agua muy caliente.
Cómo prevenirla
- Evitar el estrés: realizar técnicas de relajación, como el yoga o taichi, o cualquier deporte que nos ayude a liberar tensiones.
- Llevar una buena alimentación: toda dieta sana pasa por evitar los azúcares, las frituras, las grasas y los componentes artificiales y elevar el consumo de frutas y verduras.
- Cuidar el cabello: usar tintes naturales o productos de coloración poco agresivos para disimular las canas y recibir masajes en el cuero cabelludo.
- Dejar el tabaco.
