Cuando pensamos en tonificar las piernas, el principal ejercicio en el que pensamos son las sentadillas. Es una actividad clásica para trabajar todo el tren inferior de nuestro cuerpo.
Sin embargo, muchos ven este ejercicio como innecesario y no lo incluyen en su rutina de ejercicios. La verdad es que se trata de un método clave a la hora de querer lograr una figura más estilizada. Te contamos los beneficios de esta práctica y también cómo realizarlas correctamente.
Beneficios de hacer sentadillas
1.- Las sentadillas ayudan a quemar grasas
Uno de los ejercicios más eficaces para quemar grasa y ganar masa muscular son las sentadillas.
De acuerdo con el portal Bodytone, por cada libra adicional de músculo, tu cuerpo quemará entre 50 y 70 calorías adicionales al día. De manera que, si incrementas unas 10 libras de músculo, automáticamente quemas entre 500 y 700 calorías diarias en comparación de lo que quemaba antes de ganar músculo.
2.- Previenen lesiones
La mayoría de las lesiones se presentan cuando hacemos una rutina deportiva en la que se involucran músculos estabilizadores débiles. Estos pueden fortalecerse gracias a las sentadillas que también contribuyen a prevenir las lesiones al mejorar la flexibilidad de los músculos.
3.- Las sentadillas mantiene la movilidad y el equilibrio
Tener unas fuertes piernas es esencial para lograr mantenerse en movimiento. En este sentido las sentadillas son maravillosas para incrementar la fuera en el tren inferior. También ayudan a fortalecer los músculos abdominales, así como a estabilizar los músculos en general, lo que contribuirá a mantener el equilibrio.
4.- Ayuda con la eliminación de residuos tóxicos del cuerpo
Las sentadillas mejoran el bombeo de los fluidos del cuerpo. De esta manera contribuyen a la eliminación de residuos, así como a la administración de nutrientes a todos los tejidos, incluyendo los órganos y glándulas.
Este ejercicio también es súper útil para ayudar al sistema digestivo en la eliminación de desechos y fomentar la regularidad de las deposiciones.
A la vez, las sentadillas promueven la comunicación entre el cerebro y sus músculos, una de las mejores formas de prevenir fracturas óseas.
Cómo hacerlas correctamente
La mejor manera de hacer las sentadillas en forma correcta es levantarte con los pies abiertos a la altura de los hombros. Una vez en esta posición, la espalda debe estar en una postura neutral con las rodillas sobre tus pies.
Dobla las rodillas lentamente, así como las caderas y los tobillos, desciende hasta alcanzar un ángulo de 90 grados. Inhala mientras bajas y exhala cuando estés regresando a la posición inicial.
Es importante saber cómo hacer las sentadillas para evitar lesiones y provechar todos sus beneficios. Se trata de una actividad que no puede faltar en tu rutina. La grasa que se queman y la ganancia de masa muscular son únicas en este ejercicio.
Las sentadillas sirven también como calentamiento para comenzar cualquier entrenamiento físico y que tu cuerpo se flexibilice y tome fuerza para realizar el resto de los entrenamientos.
Si apenas estás comenzando en trabajar tu cuerpo y no estás acostumbrada a realizar sentadillas, te sugerimos que des una caminata de 20 minutos antes de hacerlas. Para su ejecución se recomienda hacer 3 tandas de 10 repeticiones cada una.
Con pocos minutos al día que dedique a este ejercicio, no solo lograrás unas piernas más tonificadas, sino que obtendrás grandes beneficios para el resto de tu organismo.
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