Una de las peores diatribas en la vida de una mujer se presenta cuando debe considerar perdonar una infidelidad o decirle adiós a esa persona que tanto ama pero que la decepcionó con su conducta.
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Sin embargo, el panorama no mejora con la respuesta a este problema: es una decisión personal que nadie puede influenciar, así que deberás analizar, sopesando los hechos, para poder escoger lo que sea mejor para ambos.
¿Perdonar o no una infidelidad?
Solo tú sabes lo que es mejor para ti, pero primero, no te juzgues por considerar dar una segunda oportunidad pese a que tu familia o amigas opinen tajantemente que lo mejor es poner punto final.
Los expertos recomiendan iniciar por aceptar que había insatisfacción y problemas en la dinámica de la pareja, porque así se puede dejar de idealizar lo que había y cada quien asumir su cuota de responsabilidad.
En estos casos muchas alegan no tener conflictos evidentes, más allá de las peleas normales de convivencia, pero es necesario destinar tiempo para observar a detalle cómo era su dinámica, porque incluso hasta la monotonía puede ser un factor.
Eso sí, no te sientas culpable por haber sido la causante ya que tu pareja es una persona con poder de decisión y capaz de asumir la responsabilidad de sus actos.
De igual manera, analiza qué tipo de infidelidad ha sucedido. Si se trató de algo meramente sexual una vez, o hubo conexión emocional con la otra persona. Los detalles también son decisivos para tomar una decisión, como por ejemplo, si fue con alguien muy cercano a ti o de forma reiterada.
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Asimismo, cuestiónate sobre lo que sientes: ¿Lo amas lo suficiente para comprometerte a empezar de nuevo y trabajar en sanar las heridas? ¿Serías capaz de volver a confiar? Piensa si él se siente de la misma manera, pero ten en cuenta, que debes tomarte el tiempo que sea necesario.
Poner en una balanza las ventajas y desventajas de continuar y terminar siempre es una buena manera de vislumbrar el camino a seguir después de una infidelidad.
Lo que debes saber si decides perdonar la infidelidad
En caso de que todavía haya amor y quieres intentarlo de nuevo, es importante saber que no se trata de dejarlo pasar, minimizarlo y olvidarlo como si nada hubiese ocurrido.
Al contrario, es fundamental que refuercen su comunicación, expresen sus sentimientos y vayan a terapia para reparar las heridas del pasado que fueron las causantes y las nuevas que dejó este suceso.
Ambos deben estar igual de comprometidos en la causa, tener paciencia y mostrar respeto por el otro. Se debe iniciar con la mentalidad de que van a empezar de nuevo aprendiendo de los errores y seguir adelante.
La clave está en el perdón porque una relación llena de rencor y falta de confianza no llegará a tener éxito ni ser sana. Este es un proceso complejo, que lleva tiempo y la determinación de hacer el trabajo interno.
«Tendremos que cambiar actitudes, pensamientos y conductas. Mediante esta reestrucutación cognitiva, podremos ser capaces de reconciliarnos con esos sentimientos que fueron violentados, y volver a la normalidad», explica la especialista María José Higueras en el portal Psicología y Mente.
Si al final decides perdonarlo, pero no habrá reconciliación, también está bien pues lo que importa es tu felicidad. Al final no se trata de olvidarlo sino aprender de lo sucedido y poder recordar ese episodio sin que nos haga daño.
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