Contrario a lo que la mayoría de las personas creen, bajarle intensidad a tu rutina de ejercicios te ayuda a conseguir buenos resultados. Esto es lo que propone el descanso activo, una manera de reiniciar tu cuerpo.
Y es que en el mundo del deporte se dice que el receso forma parte del trabajo, ¿por qué? Justo porque en realidad los seres humanos no somos máquinas incansables así que descansar ayuda a vencer la sobrecarga muscular, fatiga y otros males.
¿Qué es el descanso activo?
Podríamos describirlo fácilmente como detener tu rutina de ejercicios habitual por una menos intensa que te permita descansar, pero no detenerte del todo, justo como su nombre lo indica.
De acuerdo con Vitónica, esto no debe confundirse con variar los grupos musculares a los que se le dedica la sesión. Es decir, si entrenaste piernas al día siguiente hacer brazos.
Aunque es el deber ser y una práctica recomendada, no da en el clavo con lo que significa realmente el descanso activo, pues se trata de cambiar de actividad.
Siguiendo el mismo ejemplo, en vez de hacer piernas o brazos en el gym, algo que requiere el mismo grado de intensidad, sería ir a caminar por un parque, jugar tu deporte favorito o dar un paseo en bicicleta.
Con esto, el cuerpo se mantiene funcionando y el riego sanguíneo acelerad, mejorando la recuperación muscular, conforme con la misma fuente.
De igual manera, afirman que sirve para eliminar toxinas acumuladas por el estrés sufrido cuando se ejercita, así que al recuperar el estado habitual de los músculos, estos van a rendir mucho mejor cuando vuelvan a la actividad habitual.
Este es el gran plus que tiene respecto a los descansos pasivos, que no dejan de ser positivos también para relajarse y en especial, para favorecer emocionalmente al deportista librándolo de las marcas que se traza.
Otro factor muy importante es que son beneficiosos para evitar sufrir lesiones y acostumbrar a tu cuerpo a siempre hacer los mismos ejercicios, algo que también se nota negativamente en la ralentización de los resultados.
¿Cuándo hacerlo?
Ahora que sabes la gran importancia que tiene el descanso activo en la obtención de tus objetivos fitness o para mantenerte sano, debes encontrarle un espacio en tu agenda.
Especialistas recomiendan dejar dos días a la semana exclusivos para el descanso activo, mínimo uno, pero también recomiendan que si tienes mucho tiempo entrenando (nótese, años) pues puedes dedicarle hasta una semana entera.
Ejercicios para recuperar
Al igual que tu entrenamiento habitual, en tu descanso activo debes escoger la opción que más disfrutes para que realmente pases un momento placentero despejando la mente.
Por excelencia, los expertos recomiendan caminar. Es sencillo y no afecta a los grupos musculares que se trabajan la mayoría de los días de la semana. Activa el metabolismo, la circulación y el sistema respiratorio además que ejercita tren inferior y superior.
Eso sí, esto no significa que debas caminar poco tiempo o sin esfuerzo. Lo ideal es hacerlo por un tiempo prolongado pero prudente, entre 35 y 45 minutos y de manera rápida.
En el mismo grupo se encuentra correr puesto que tiene beneficios similares a los de caminar, pero en este caso deberás hacerlo con una intensidad menor a la que acostumbras si quieres perder peso o aumentar la resistencia física, explicó la fuente.
Escoge un buen calzado y que el terreno no sea duro para que no tenga fuerte impacto en tus piernas, algo que también aplica en la práctica de deportes grupales como el baloncesto, fútbol, tenis, entre otras. El yoga igualmente está entre los indicados.
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