Un dicho afirma que «para el amor no hay edad», y aparentemente tampoco kilómetros. Una relación a distancia se convirtió en algo cotidiano y hasta interesante. Las bondades de las redes sociales permiten que dos personas puedan conectarse ‘full time’, compartiendo charlas, imágenes y comprometiendo los sentimientos.
Aunado a Facebook, Instagram y el propio WhatsApp, están aquellas plataformas, como Tinder, dedicadas a diseñar citas. Con solo indicar un nombre, edad y foto, internet te enlaza con miles de personas que buscan lo mismo: una oportunidad para el amor.
Sin embargo, la tecnología no mide perfiles psicológicos, condiciones físicas ni veracidad de identidades. Algunas aplicaciones han intentado fortalecer sus medidas de seguridad, pero el riesgo siempre está latente. El llamado «amor virtual» es un título tendencia que llega a ilusionar más que los episodios tradicionales.
4 verdades sobre una relación a distancia
Charlas interesantes
Ya que la única opción del momento es precisamente charlar, estas se vuelven más interesantes porque ambos están enfocados en ello. La distancia fortalece la capacidad de entablar conversaciones inteligentes, entretenidas y que generan divertidas opiniones.
Por mensajes es más fácil expresarse
Exteriorizar los sentimientos en un ‘face to face’ suele ser complicado para ciertas personas. Pero a través de internet surge una inspiración y sinceridad que permite expresar un mensaje más claro. Además, el chat ofrece la posibilidad de editar y confirmar lo que se desea enviar.
Aprenden a ser más fuertes y a permanecer
Una relación a distancia desarrolla la paciencia y el deseo de continuar en ella. No necesariamente surge de dos personas que están conociéndose, sino de parejas que han debido separarse por motivos de trabajo. Estar lejos y permanecer es de valientes, sobre todo cuando no hay escenarios concretos.
Ejercita la imaginación
Esto va direccionado a la intimidad, aquellas conversaciones que suben de tono y pese a no haber contacto físico, la imaginación vuela. Y precisamente esas imágenes son las que se almacenan para cuando llegue el momento de practicar aquello que se dijo con tanta pasión.
Y 3 mentiras…
Las promesas de amor
Recibir promesas que no se cumplen es cruel, pero hacerlas sin certeza también lo son. La credibilidad en una relación a distancia pende de un hilo, así que es mejor cuidarla que arriesgarla, ya que podrías perderlo todo. «Nos veremos pronto, lo prometo» es una frase que puede no tener fundamento. Pero expresar algo como «Deseo verte y confío en que será pronto», abre la puerta a una afirmación llena de posibilidades.
Mayor seguridad
No por estar a cientos de kilómetros estás en plena seguridad. Tu integridad física está protegida, ciertamente, pero no tu reputación. Cuidado con lo que expresas y compartes en un chat porque colocas tu privacidad en poder de otra persona.
No hay compromiso
Aquellas personas que deciden tener una relación a distancia, creyendo que no habrá compromiso están equivocados. Con el paso de los días, es completamente normal que una de las partes necesite atención, tiempo y fidelidad. Quienes que se quieran embarcar en los sentimientos de alguien más sin pensar en esto, van en la dirección incorrecta.
Los «mitos» sobre el amor virtual inundan las redes sociales, ya que no hay bases científicas. Las opiniones de terceras personas también se involucran y pueden jugar a favor o en tu contra. Lo más importante en cualquier episodio es que cuides tu salud emocional, ya que las verdades y mentiras de una relación a distancia crean confusión, ilusión y adicción.
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