Las vitaminas son nutrientes esenciales y deben consumirse a diario para que nuestro cuerpo funcione de manera óptima, y la vitamina C no es la excepción. Pero como todo, si se abusa de ella puede desarrollar efectos secundarios en tu cuerpo.
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La función más importante de la vitamina C es que refuerza el sistema inmunológico. En estos tiempos de pandemia es la razón por la que la mayoría de nosotros tomamos estos suplementos.
Sin embargo, según reseña el portal Food NDTV, si se consume a través de alimentos naturales no es peligroso; pero al tomar vitamina C en exceso vía suplementos, puede llevar a una sobredosis.
En dosis menores a un gramo se produce una absorción de 70-90%, mientras que al superar esa cantidad solo se absorbe el 50%. Lo que no absorbe el cuerpo puede irritar el tracto gastrointestinal y producir efectos secundarios como diarrea, náuseas, vómitos, acidez, dolor de cabeza e insomnio.
Además, hay síntomas más delicados que debes tomar en cuenta:
Cálculos renales
El exceso de vitamina C se excreta de nuestro cuerpo a través de la orina. Pero a veces, este exceso se une a otros minerales formando cristales que pueden dar lugar a cálculos en los riñones.
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Absorción de vitamina B12:
El exceso de vitamina C puede interferir con la absorción de vitamina B12. De hecho, se recomienda que si estás tomando estos dos suplementos vitamínicos, debes mantener un margen de aproximadamente 2 horas entre ellos.
Para protegerse contra estos posibles efectos secundarios se ha establecido un límite de ingesta de vitamina C por suplementos
- Adultos: 2000 mg / día
- Embarazadas y lactantes: 1800 mg / día
- Bebés: 400 mg / día
- Niños de 4 a 8 años: 650 mg / día
- 9-13 años: 1200 mg / día
- 14-17 años: 1800 mg / día
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