Los libros son un portal a otros mundos; un escape momentáneo de la realidad que nos acongoja. No importa cuántas veces lo leas, cuando un libro te deja un mensaje tan especial, sigue siendo igual de enriquecedor que la primera vez.
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A veces, cuando más perdida te sientas, el remedio mágico está en uno de esos cuentos infantiles que te hicieron sonreír de niña. Hay libros infantiles que cuando los lees de pequeña te dejan cierta lección pero cuando les vuelves a echar un vistazo de adulto, te dejan con otra perspectiva que no habías entendido antes.
Aquí te dejamos algunos libros que te cambiarán la vida si los lees ahora que eres más grande.
Matilda – Roald Dahl
Seguramente has escuchado hablar de la niña genio que podía mover objetos con el poder de la mente. Quizá viste la película o quizá leíste el libro cuando eras niña sin embargo, todo adquiere un significado diferente si lo ves desde una perspectiva más adulta. Ésta encantadora historia, escrita en 1988, ha ganado múltiples premios y ha sido traducida a más de 50 diferentes idiomas y adaptada a innumerables películas y obras de teatro. Narra las aventuras de Matilda Wormwood, una niña genio rodeada de adultos mezquinos e ignorantes a quienes les enseña a no meterse con los sueños e ilusiones de los niños.
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El jardín secreto – Frances Hodgson Burnett
Una de las historias más encantadoras que podrás leer. El jardín secreto, de Frances Hodgson Burnett es un clásico que también ha sido adaptado a películas, obras de teatro e incluso animación. Narra la vida de Mary Lennox, una huérfana malcriada que es enviada a vivir con su tío en Yorkshire tras la muerte de sus padres. Por si el ambiente miserable no fuera suficiente, Mary tiene que soportar a Medlock, la estricta ama de llaves. Hay muchos detalles que no captamos de niños, pero si lees esta historia siendo adulto, te darás cuenta que se trata de un viaje hacia el autoconocimiento y la madurez a través del jardín secreto que descubre en la extensa finca de su tío.
Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas – Lewis Carroll
Ésta no es sólo una película Disney, sino una novela escrita por Lewis Carroll de 1865. Alicia en el país de las maravillas es la extraña y maravillosa historia de una niña que cae por la madriguera de un conejo y es transportada a un mundo fantástico lleno de personajes extraños. Un sombrerero loco, un conejo blanco histérico, una oruga que fuma narguile y un gato filosófico se han convertido en un referente de los cuentos infantiles. Aunque parezca «cosa de niños» en realidad invita a un análisis mucho más profundo sobre el camino a la adultez que seguro te dejará pensando.
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La telaraña de Charlotte – E.B. Blanco
¿Quién no recuerda la historia de Wilbur, el pequeño cerdito y Charlotte, la vieja araña sabia? Charlotte teje hermosas telarañas con palabras que van guiando a Wilbur por la vida y que incluso lo salvan de convertirse en un pedazo de chuleta. El libro ingenioso y compasivo, capaz de enseña a adultos y niños sobre la amistad y la pérdida. A veces necesitamos hacer una pausa para recordar qué se siente ser un niño, tener imaginación y la libertad de pensar cosas increíbles. El libro fue publicado en 1952 y desde entonces ha tenido varias adaptaciones en cine y televisión.
Harry Potter y la piedra filosofal – J.K Rowling
Por supuesto que Harry Potter tiene que estar en esta lista. Más allá de las famosas películas, el libro de J.K. Rowling sin duda fue un parteaguas en la vida de muchos niños. La historia de un niño mago de 11 años con enormes gafas redondas y una cicatriz en forma de trueno reavivó el género de fantasía que estaba perdido. Si lo leíste de niña, te recomendamos que vuelvas a hacerlo ya que seguro pasaste por alto muchos detalles que tampoco quedaron plasmados en las películas y que te harán un viaje de introspección en el caos de la vida adulta.
