La caída del cabello es parte de la vida cotidiana de muchas mujeres. Estás tan acostumbrada que a veces no te das cuenta hasta que obstruye el desagüe de la ducha y pasas por alto si tus cepillos están llenos de bolas de pelo. Sin embargo, en estos últimos meses la situación ha empeorado para muchas ya que los niveles de estrés han aumentado significativamente.
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En promedio, perdemos alrededor de 80 cabellos por día pero si de pronto sientes que es mucho más y que se está haciendo notorio, es momento de prestar atención. Sí, la caída de cabello es normal y hay muchas razones detrás de esto. Lo que no está bien es que se deba al exceso de estrés que estás teniendo en estos momentos.
Existe la posibilidad de que estés genéticamente predispuesta al adelgazamiento del cabello, lo que significa que puede haber una reducción progresiva y gradual en el volumen de tu melena. También puede haber un factor hormonal que además de causar acné y fluctuaciones de peso, provocan el adelgazamiento de tu cuero cabelludo. Todas estas situaciones pueden tener tratamientos simples que ayuden a fortalecer tu melena y desacelerar la pérdida de cabello.
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Cuando se trata estrés, hay un trabajo más profundo detrás ya que tiene que ver con el manejo de tus emociones, algo que en estos momentos está siento muy complicado para todas. Y es que es algo que se ha vuelto parte de nuestro día a día, entre la crisis sanitaria, las malas noticias, la situación en casa o el trabajo. Nuestra salud mental ha estado más a prueba que nunca y está teniendo repercusiones físicas importantes.
No siempre puedes evitar el estrés en su vida, pero puedes minimizarlo.
-Antes de dormir, evita consumir imágenes demasiado violentas o que te pongan nerviosa. Lo mejor es que te alejes de la tecnología poco antes de que vayas a la cama. Una vez que esté ahí, realiza ejercicios de respiración para evitar que los pendientes del día se queden en tu mente.
-La alimentación también juega un papel fundamental. Mientras mejores nutrientes le aportes a tu cuerpo, mejor te sentirás. Evita consumir alimentos con alto en grasas saturadas y azúcares.
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-Trata de tomar pequeños descansos durante tu jornada laboral o también comenzarás a sufrir de dolores de espalda.
-Haz ejercicio y mantente hidratada. No tiene que ser nada pesado, busca rutinas de yoga o baile y verñas que despejarás tu mente.
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Si notas una pérdida de cabello repentina o irregular o una pérdida de cabello mayor a la habitual al peinarte o lavarte el cabello, habla con tu médico. La pérdida repentina de cabello puede indicar una afección médica subyacente que requiere tratamiento. Si es necesario, el médico también puede sugerir opciones de tratamiento para la pérdida de cabello.
De igual forma, si te sientes sobrepasada por la ansiedad y el estrés, considera pedir ayuda de un especialista en salud mental. No es una enfermedad ni tampoco es cosa «de locos» ¡al contrario! Una persona dedicada a ello te guiará para que a encuentres solución a eso que te tiene tan abrumada.
