La copa menstrual se ha convertido en un método popular entre las mujeres para controlar el flujo menstrual. Se trata de un recipiente de silicón de grado quirúrgico que se inserta en la vagina durante la menstruación para depositar la sangre. A diferencia de los tampones o las toallas sanitarias, la copa menstrual no la absorbe sino que la deja contenida en el interior de la copa hasta que se extrae y se desecha.
PUBLICIDAD
Cambiar las toallas sanitarias o tampones por una copa menstrual se ha convertido en una forma más ecológica de sobrellevar la menstruación, además de que se cree que es mucho más seguro y sano. Eso sí, resulta inevitable que vengan muchas dudas y miedos en torno a su uso, uno de ellos es ¿qué pasa si se queda atascada?
Las copas suelen tener una punta que ayuda a extraerla (es el equivalente al cordón que viene con los tampones). Ésta nunca llegará más allá del cuello del útero, el cual funciona como un tope. Quizá tengas que cortar un poco este rabito para que no sobresalga pero todo depende de la forma de tu cuello uterino y claro, de tu comodidad. Algunas marcas lo venden con una terminación muy corta así que debes buscar la que mejor te quede.
Algunas veces una copa menstrual se moverá hacia arriba por el canal vaginal. Si bien esto no es motivo de alarma, puede dificultar un poco el alcance de la copa para extraerla.
En realidad, la anatomía de tu cuerpo hace que sea imposible que la copa se pierda por completo y desaparezca como si fuera un sombrero de mago. Si sientes que se movió de lugar o de verdad crees que se perdió, esto es lo que debes hacer:
Lávate bien las manos ya que tendrás que introducir tus dedos en tu vagina. Siéntate en el escusado (para evitar que se derrame) con las piernas abiertas y busca el rabito con tus dedos. RESPIRA.
También lo puedes hacer de pie, en la bañera. Lo que te sea más cómodo.
PUBLICIDAD
Una vez que lo sientas, mueve tu pulgar y el índice hacia arriba para tomar la parte inferior de la copa. En ese punto, puedes pellizcar la copa para liberar la succión y romper el sello. Este sello ayuda a prevenir fugas, uno de los beneficios de cambiar de tampones a una copa menstrual, pero romperlo es esencial para quitar la copa, y bajarlo puede ser una práctica. No te preocupes: lo dominarás.
¿Qué pasa si por más que intentas, no puedes sacarla?
Puja
Si se vuelve más difícil de alcanzar, simplemente empuja hacia abajo en una serie de movimientos con los músculos del estómago (similar a evacuar), busca el rabito y jala hasta que puedas alcanzar la base de la copa.
Sentadillas
Si aún no puede alcanzar la taza, póngase en cuclillas en el piso o levante una pierna y descanse el pie en el asiento del inodoro o en el borde de la bañera. Esto ayudará a bajar la copa y facilitará el alcance ya que esta posición acorta la vagina.
Relájate
De verdad, la relajación lo es todo. Asegúrate de estar relajada para que tus músculos vaginales no se pongan tensos. Si te sientes demasiado tensa, respira profundamente, camina y haz otra cosa durante unos minutos e intenta nuevamente. . Por eso, es recomendable que busques un lugar donde puedas estar a solas, cómoda y que nadie te moleste. SI no estás en un lugar tan cómodo, respira y no permitas que la situación te haga sentir presionada. Por lo general, no es urgente quitar una copa, así que tómate tu tiempo y no intentes retirarla demasiado rápido