Cambiar las toallas sanitarias o tampones por una copa menstrual es un gran salto pero es algo que recomendamos para todas. No sólo porque es una forma más ecológica de sobrellevar tu menstruación sino porque te darás cuenta de muchas cosas sobre ella que ignoras cuando usas cualquier otro método.
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Eso sí, resulta inevitable que vengan muchas dudas y miedos. Estos son algunos de ellos y la realidad que hay detrás.
Miedo #1: Será demasiado costosa
Algunas copas pueden parecer caras pero ¡realmente solo necesitas una. Aunque el costo inicial de una copa menstrual puede parecer elevado, no estarás tirando tu dinero a la basura porque son re utilizables. No necesitarás comprar cajas o paquetes de artículos desechables cada mes porque lo único que necesitas es insertarla, lavarla y volver a insertarla. Si la cuidas bien, en teoría tendrá un tiempo de vida de 10 a 15 años. Así que no tengas miedo de invertir en una que siga los estándares de calidad pertinentes..
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Miedo #2: Que se atasque o se pierda dentro de tu vagina
Las copas suelen tener una punta que ayuda a extraerla (es el equivalente al cordón que viene con los tampones). Ésta nunca llegará más allá del cuello del útero, el cual funciona como un tope. Quizá tengas que cortar un poco este «rabito» para que no sobresalga pero todo depende de la forma de tu cuello uterino y claro, de tu comodidad. Algunas marcas lo venden con una terminación muy corta así que debes buscar la que mejor te quede. Si sientes que se movió o se perdió en alguna parte, toma un respiro. Todo lo que tienes que hacer es tratar de orinar para relajar los músculos y luego sacarla. No se deslizará pero el tallo se moverá naturalmente más hacia abajo y podrás sacarla.
Miedo #3: Llenar todo de sangre
Seguramente cuando te pusiste una toalla sanitaria por primera vez, tenías miedo de que la sangre saliera por todas partes y lo mismo con tu primer tampón. Quizá incluso aún tienes ese miedo y no ha cambiado nada ahora que has decidido usar una copa menstrual. Es normal pero no debes temer. Sí, al principio podrá ser complicado y tomara un tiempo acostumbrarte y tener confianza. Habrá incluso momentos en los que tengas que limpiar la sangre de tus rodillas, la taza del baño o el suelo cuando intentes sacar la copa para vaciarla pero eso sólo será mientras tomas práctica.
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Miedo #4: Duele
La colocación de una copa menstrual no es nada dolorosa pero sí puede ser un poco molesta por varias razones como que la estás insertando de forma incorrecta, porque no tienes poco flujo menstrual o porque no has escogido la correcta. Es normal que tengas un poco de miedo pero es cuestión de práctica, así que puede llevar hasta un par de periodos hasta que lo logres. Ten paciencia.
Miedo #5: Olores desagradables
Es probable que pienses que almacenar la sangre en una copa todo el día hará que huela muy mal pero no es así. La copa menstrual es totalmente libre de olores. El hecho de que la copa acumule la sangre en vez de absorberla como ocurre con un tampón o toalla sanitaria, hace que ésta se mantenga en estado líquido, lo que no permite que se seque y cree un olor. Tu copa puede comenzar a tener olor, al igual que tu vagina pero no es nada comparado con el olor a sangre que se descompone en una toalla o un tampón. De todos modos no debes avergonzarte si llegas a detectar algún aroma. Una buena limpieza de tu copa y general, hará la diferencia
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