1- Responder preguntas
“Escribir consiste en responder dos preguntas: qué decir y cómo decirlo. El ejercicio de responder el qué genera el cómo”, asegura Arelis Uribe (@arolasuribe), periodista y escritora, quien actualmente estudia una maestría en Escritura en la Universidad de Nueva York.
¿Qué? Como recomienda Arelis, escribe de lo que pasa, de lo que duele, incomoda. Desde el fuego, lo oscuro, de lo que te desborda. También de cómo te tocó la revolución, cómo es el olor a lacrimógena, de las nuevas heridas y cómo las sientes en el cuerpo. Como dice Patti Smith, “escribe desde el lugar de tus heridas”.
¿Cómo? Sin miedo y con honestidad radical. “Escribe como si te fueras a morir mañana”, aconseja Juan Radrigán o, como dice la cronista argentina María Moreno, “si no les sale, digan la verdad”.
“Partir con una frase. Un texto es un tramado de frases. Una palabra junto a otra forman una frase, una frase con otra forman un párrafo y un párrafo junto a otro conforman un texto”, detalla Uribe. Y no olvides nunca el poder de una buena frase concisa, honesta, poderosa.
2- Escribe como hablas
“Usa la primera palabra que venga a tu mente. Usa la voz con la que escribes en WhatsApp. La belleza no está en perseguir palabras rebuscadas, sino en la honestidad profunda. María Moreno dijo: ‘La prosa simula una voz’. La escritura es como el canto, se trata de la búsqueda de la voz propia, de encontrar la palabra más exacta que calce contigo o con lo que necesitas decir”. La escritora sugiere imaginar que hablamos con una amiga mientras tomamos una cerveza, es decir, con honestidad brutal. No pienses en quién lo leerá.
3- Preocúpate de la ortografía
¿Para qué sirve? Para entendernos. “Las comas son subjetivas. Si suena bien para ti, úsalas. Sigue tu intuición. Primero, hay que conocer las reglas para después romperlas. Hasta que no desarrolles formas propias, es mejor seguir las formas universales de ortografía y redacción, para que así te entiendan quienes te lean”.
4- Piensa en la estructura
“Escribir es explicar cómo pasamos del inicio al clímax y del clímax al final”, comenta la periodista. Otro consejo: lo que más impacta, al final. No olvides la estructura inicio, desarrollo, clímax-giro, reconciliación. En la literatura, igual que en la política, sin conflicto no hay historia.
5- Escribir es robar
“El mejor poeta no es el que mejor escribe, sino el que mejor roba. Roba las formas de los otros que te gustan y úsalas para ti. Es imposible que eso sea plagio, porque te apropias de una forma y la mezclas con la tuya. La creación es robar y mezclar lo que ya existe. La originalidad son ideas viejas dispuestas novedosamente”.
6- Escribe para ti
“Cuéntate la historia a ti primero, para no olvidarla, con completa honestidad. Puedes jugar a escribir intentando susurrarle al oído con palabras a tu mamá, a una amiga, a un muerto, al país. Escribir pensando en un interlocutor, no en un público. Además, el público es ficción, jamás sabremos si alguien nos leerá”.
7- Sirve para no olvidar
“Anota tus pensamientos o las ideas que consideras buenas. Sólo lo que se escribe no se olvida. Lleva una libreta a todos lados, anota las frases buenas que digan otras personas, haz un chat contigo misma”, pide Arelis Uribe.
8- Es un proceso
Una de las frases de Bukowski: “Escribe borracho, edita sobrio”. Para Uribe, es muy necesario escribir con ganas, después reposar el texto, para luego volver a él. “Dedícate a escribir un poco cada día. Toma tiempo esculpir una escultura”, comenta.
9- Edita, edita
“Relee los textos y hazles cambios. Menos es más. La gente se aburre. En la síntesis está la belleza, eso es la poesía, expresar el mundo con pocas palabras y sencillas. Una vez leí ‘cariño, te escribí diez páginas. Cuando tenga tiempo, te escribo una’”.
10- Escribe ahora
Como acentúa la escritora, haz lo que puedes con lo que tienes. No esperes la perfección, porque la perfección no va a llegar nunca. “Tus palabras son tu forma. Confía en ellas”, opina Arelis.
11- Comparte
Que tus palabras, igual que tus sentimientos, no se queden guardados en un cajón.
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