El sexo además de darte placer, trae beneficios para la salud. Pero ¿qué pasa si no tienes sexo por un período de tiempo prolongado? El estado de ánimo puede verse afectado de varias formas.
Peor estado de ánimo
La excitación y el orgasmo pueden causar la liberación de sustancias químicas que te hacen sentir muy bien contigo y con tu cuerpo. Estas sustancias químicas te ayudan también a aliviar el dolor y a mejorar tu estado de ánimo. Si dejas de mantener sexo con regularidad, entonces es posible que empieces a tener un peor humor y un estado de ánimo más bajo.
Más estrés
Después de un orgasmo te puedes sentir realmente relajado, pero cuando se tiene menos sexo el estrés puede ir en aumento.
El sexo reduce los niveles de estrés en el cuerpo a través del placer, proporcionando una sensación de comodidad y bienestar. Todo esto es útil para tu sistema inmunológico porque un cuerpo menos estresado puede defenderse mejor de las enfermedades. No mantener sexo puede hacerte más vulnerable a los resfriados, la gripe y otros virus.
Menos satisfacción en las relaciones
Puedes sentir menos satisfacción en las relaciones de pareja o incluso en tu relación contigo. La intimidad física funciona como una herramienta para sentirse bien en muchas parejas, manteniéndote más conectado emocionalmente con tu pareja.
Problemas de autoestima
Cambiar de ser sexualmente activo a sexualmente sedentario también puede dañar tus relaciones de otra manera, incluyendo la relación contigo.
Desde el punto de vista médico, tener menos sexo no implica que te enfermarás, sin embargo, las emociones y los juicios hacia nosotros mismos pueden ser muy perjudiciales.
Esto puede hacer que sientas desafíos emocionales y tener vergüenza social y ansiedad.
Una vez que estés consciente de estas posibles reacciones a la falta de sexo podrás hacerle frente y no dejarte llevar por emociones negativas. La relación más importante de todas es la que tienes contigo.