En 2010, Gabourey Sidibe dejó sorprendidos a los críticos de cine con su aparición en la película ‘Precious’, ya que su interpretación de una chica atormentada por su tamaño, color de piel y violación de su padre fue algo nunca antes visto en una novata.
Sin embargo, durante años, la nominada al Oscar fue blanco de burlas por su robusta figura que para nada encajaba en los estándares de belleza Hollywoodenses y que además, opacaba su talento. Con tantas burlas y criticas, cualquiera pensaría que Sidibe caería y saldría corriendo, sin embargo, lo tomó como un impulso para seguir demostrando que no importa lo que digan, ella es hermosa y talentosa.
Sidibe nunca ha dejado de desfilar en alfombras rojas con gran porte y una sonrisa en el rostro, ni tampoco ha dejado de compartir fotografías luciendo ropa de diseñador o modelos «sexys». Al contrario, ella ha dejado claro que mientras más se hable de ella, más aparecerá para sacar de quicio a los que la odian.
Hace unos meses, la actriz decidió someterse a una cirugía de bypass gástrico y adoptar un estricto régimen de alimentación y ejercicio para bajar de peso, no por imagen sino por salud pues desde hace varios años ha tenido problemas para mantenerse saludable. A pesar de que es un proceso largo y con muchas implicaciones, Sidibe sigue luciendo su cuerpo, que sin ser esbelto como el que la industria exige, sigue siendo perfecto por el simple hecho de que lo acepta.
Por ello, esta guapa actriz impactó a sus seguidores al compartir una foto donde aparece luciendo un sexy outfit con un bralette negro. ¿Quién dijo que esta prenda es sólo para las chicas de senos diminutos y cuerpo de Kendall Jenner? Gabourey Sidibe dejó claro que TODAS, sin importar talla o complexión, podemos lucir hermosas y sensuales con las últimas tendencias de moda.
Así que no importa si tienes senos grandes o pequeños, caderas prominentes, rollitos o panza…si te gusta ¡úsalo! No por nada dicen «de la moda lo que te acomoda». La clave está en la actitud y la seguridad en una misma y no permitir que la opinión del mundo te tumbe.