Nuestra casa es el lugar en que podemos relajarnos, ser nosotras mismas sin tener que aparentar o pretender. Generalmente, cuando pensamos en un buen descanso nos enfocamos en la calidad del colchón o de la almohada, pero hay toda una ciencia detrás de un espacio apto para tu regeneración física y mental.
PUBLICIDAD
En eso se basa precisamente el feng shui, en la idea de ocupar los espacios de forma consciente y armónica, con elementos estratégicos que contribuyen a la paz mental y al bienestar físico.
Aunque no nos demos cuenta, hay elementos que pueden sanarnos sólo por estar ahí. La medicina alternativa los aprueba y el feng shui los valida, así que no perdemos nada con probar. De hecho, probablemente notemos su efecto positivo al corto plazo.
Aceites esenciales
Así como pueden ser buenos para los masajes corporales relajantes, los aceites esenciales también pueden sanarnos a través del olfato. Para un efecto anti estrés, puedes conseguir un difusor de aceites esenciales con olor a lavanda. Hay varias alternativas en el mercado, y lo mejor, es que lo puede programar para que funcione en los momentos en que lo necesites.
Diario o libreta de tapa negra y un lápiz rojo
Una forma de sanar la mente es escribir lo que sientes. Puede ser para alcanzar metas, desahogarte o simplemente, para expresarte. Es bueno que tengas una libreta o cuaderno en tu habitación que tenga tapa negra, porque ese color representa sabiduría. ¿Por qué el lápiz rojo? Según el portal MindBodyGreen, ese color simboliza prosperidad y le da fuerza a lo que escribimos.
Una tela para cubrir los objetos electrónicos
Lo ideal, sería que no tuviéramos nada electrónico en nuestra habitación, pero como sabemos que es difícil, lo que podemos hacer es cubrirlos por la noche. Consigue una tela de algún color neutro (ojalá blanco) para cubrir la pantalla de la televisión o el computador. Con esto, evitarás que la radiación electromagnética de estos artefactos intervengan con tu sueño.
Plantas y esencias florales
Tener plantas verdes en tu lugar de descanso ayuda a restaurar la energía, a calmar el estado de ánimo y también, proveen oxígeno. Las flores también tienen un efecto sanador: cuando las miramos y olemos, nuestro cerebro lo asocia a experiencias positivas.
