Karlye Thurlow es una mamá que no estaba a gusto con su peso, pero no hacía nada para solucionar su problema, hasta que un día decidió cambiar su estilo de vida por completo.
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Como muchas de nosotras Karlye empezó a subir de peso y sin darse cuenta llegó a pesar 120 kilos (264 lb). Y es que llevaba una dieta desbalanceada y rica en azúcar, de hecho ha confesado a través de sus posts en Instagram que se bebía diariamente ¡4 litros de refresco de Cola!
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Un día, mientras le preparaba la comida a Logan, su segundo hijo, se dio cuenta que ella no era unbuen ejemplo para sus hijos y que debía cambiar por el bien de ellos y de ella misma.
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«Estaba cocinando la comida para mi hijo cuando él tenía unos pocos meses de edad, entonces me di cuenta de que era algo hipócrita alimentar y enseñarles a comer correctamente cuando yo no predico el mismo ejemplo».
Fue así como Karlye decidió dar un giro de 180º a su vida y con mucha determinación y esfuerzo unició su camino hacia un estilo de vida más saludables.
Dejó de beber bebidas azucaradas y se inscribió a un gimnasio con un entrenador personal y logró bajar 60 kilos (132 lb) en 9 meses.
En Instagram fue documentando su cambio y hoy se ve más feliz y más guapa que nunca.
Para Karlye, este no ha sido un camino sencillo, pues desde su niñez sufrió de violencia por parte de su madre, sus hijos fueron diagnosticados con autismo y pasó por un triste divorcio, todo esto afectó su salud física y también su autoestima, pero también de esos malos momentos tomó la fuerza necesaria para lograr un cambio positivo en su vida.
Ahora Karlye sigue esforzándose por mantenerse en forma y poder darle un buen ejemplo a sus hijos a través de un estilo de vida saludable que incluye dieta y ejercicio.
