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Generación hook up: cómo las redes sociales mataron el romanticismo

Glamour España denomina así a los jóvenes entre 18 y 35 años que, valiéndose de la tecnología, han eliminado al romance.

El portal web de la revista Glamour España ha hecho una observación, a grandes rasgos, determinante al titular a la generación millennial como la generación hook up. En el mismo artículo, se implica que esta revolución no ha sido tan drástica desde los años 60.

Recordamos, desde luego, que hook up significa “enrollarse.” O dicho claramente: tener sexo. La característica principal de esta cultura es la libertad, el atrevimiento y la manera sin preámbulos de buscar justo eso. Cualquier otro objetivo, perspectiva, cita o llámese relación, no son necesarios ni un impedimento para esta generación.

El artículo afirma:

Darse el teléfono para quedar, ir a cenar, al cine o tomar algo eran preámbulos necesarios (molestos, para más de uno) antes de acostarse con alguien. Ahora todo esto ocurre después y sólo si la persona merece la pena para algo más que un revolcón.

Las redes sociales, en especial con el reciente boom de las apps para citas, se han valido ante la comunicación que están logrando a través de nuestro entorno. Y estos son, precisamente, la herramienta principal. Hoy en día, tenemos un Match.com al alcance de nuestros pulgares.

Una encuesta de Tuenti Móvil reveló que el 60% de los jóvenes españoles usa su celular para ligar. A la vez que Tinder, la red social más popular para citas, obtiene 4’500 nuevos usuarios cada día sólo en el país europeo.

Glamour achaca este cambio radical en la sociedad al alcance que tenemos con la pornografía. No sólo necesitas dar un par de clics para observar un preview de tu fantasía sexual más íntima, sino que eres testigo del sexo 24/7 gracias a los medios de comunicación. Desde 50 Shades of Grey hasta el nuevo look de Miley Cyrus.

Sea como fuere, esta dinámica tiene mucho que ver desde el punto de vista en que se perciba. Libertad, sinceridad y ruptura de esquemas para tener una vida sexual propia. Pero, claro, dificultando la existencia de una relación.

El romanticismo daba quizás pasos innecesarios para lo que se busca en ocasiones. Por el caso contrario, cuando de una relación se trata, podría causar daños perjudiciales en el ámbito emocional para cuando de afecto y en el caso de una relación seria.

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