A sus 23 años, Selena Quintanilla, se encontraba en la cima de su carrera y se había transformado en una de las figuras más grandes de la música Tex-Mex en Estados Unidos y México. Sin embargo, su más ferviente admiradora y confidente, Yolanda Saldívar, terminó por convertirse en su asesina, el 31 de marzo de 1995.
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De acuerdo a las investigaciones, Yolanda y Selena tuvieron una discusión en el motel Days Inn, en Corpus Christi, Texas. Saldívar sacó un revólver para amenazar a Selena y evitar su despido sin embargo, cuando la intérprete intentó huir, le disparó por la espalda. A pesar de que la cantante llegó con vida al hospital, los médicos no pudieron hacer nada ante la enorme pérdida de sangre y falleció.
Tras las rejas
Yolanda Saldívar fue condenada a cadena perpetua en la prisión Mountain View, en Gatersville, por el asesinato de Selena. Sin embargo, a 22 años de estancia tras las rejas, Saldívar asegura que su vida es un tormento.
Desde 2016, la ex asistente de Selena, interpuso una demanda por la que hoy sigue exigiendo con la cual ha pedido una compensación por medio millón de dólares por todo el “dolor, sufrimiento, lesiones físicas y estrés emocional” que ha sufrido dentro.
De acuerdo con Saldívar, en 2016 tuvo una fuerte caída que no fue atendida como debía ser por lo que se agravó y le causó dolores «que pudieron evitarse». En la demanda estipula que a pesar de su baja estatura, de padecer obesidad y una condición médica (supuestamente problemas del corazón y tiroides) le fue asignada la cama más alta de la celda.
Por lo tanto, considera que es responsabilidad de las autoridades y señala que los custodios han demostrado un “mal juicio, despreocupación y actos sádicos” en su contra.
Será en 2025 cuando Yolanda sea candidata a libertad condicional pues asegura que hasta el momento, ha cumplido con todas las reglas de la prisión, además de ser una reclusa modelo por lo que estos actos en su contra son algo personal.
