Por Karen Hernández
Cuando hay un cambio en el físico de las celebridades, especialmente cuando se trata de una mujer, es inevitable que forme parte de los encabezados más importantes alrededor del mundo. No importa lo que haga la famosa en cuestión, siempre habrá algo que criticarle; la diferencia es que cuando una baja de peso, o la felicitan por lucir espectacular o le dicen anoréxica y si sube de peso, se ve terrible o «está demasiado gorda».
También hay quienes opinan que una que está delgada se ve demacrada o que está deprimida «tras su ruptura con tal» o los que dicen que las que suben de peso es porque «están embarazadas».
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Recientemente Rihanna ha sido tema de conversación en internet debido a un evidente aumento de peso que la ha llevado a ser blanco de críticas y especulaciones al por mayor. La cantante fue fotografiada en las calles de Nueva York con su nuevo cuerpo y mientras que muchos lanzaron comentarios como «se ve que ha comido bastante bien» otros apostaron porque «seguro está embarazada» y hasta cuestionado de quién podría ser el «bebé». Nada de eso.
I love when Rihanna get thick 😩😩
— K. Don ✨ (@sincerelykm__) 24 de mayo de 2017
I’m praying this ain’t Photoshop, cuz I LOVE «Thick RiRi» @rihanna 😍😍😘😘😂😂😎😎 https://t.co/i3MxBBDNpi
— $uave (@suaveworld) 16 de mayo de 2017
Rihanna siempre ha sido el ejemplo de una mujer confiada en su cuerpo que no teme a exhibirlo en la forma que ella quiera, bien o mal, es su elección, pero ahora resulta que también la critican porque está usando ropas enormes o no glamorosas con «semejante cuerpo».
El aumento de peso de Rihanna se convirtió en lo más tendensioso de la semana y el que todos esperen que esté embarazada antes que otra cosa, es muestra de que la mujer que ha ganado peso será «perdonada» por el hecho de estar cumpliendo con su función biológica «natural» antes que por un «se me dio la gana estar así».