De ahora en adelante, para saber si los huevos que compras son frescos, lo único que tendrás que hacer es colocarlos en un vaso con agua. Dependiendo de la inclinación que tomen, podrás saber si son frescos o incluso si ya no debes comerlos.
![](https://www.nuevamujer.com/resizer/v2/LTVVEUNZUBEDZHKECGPOGHN2LE.jpg?auth=fe455d7bc49b64324ca4996f649060a8f1ec41a5564488e35262b3799d9677b9&width=800&height=1174)
¿Te gustaría recibir notificaciones de las noticias más importantes?
De ahora en adelante, para saber si los huevos que compras son frescos, lo único que tendrás que hacer es colocarlos en un vaso con agua. Dependiendo de la inclinación que tomen, podrás saber si son frescos o incluso si ya no debes comerlos.
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD