Gracias al avance de la tecnología, ahora es posible ver cómo quedamos en una fotografía, y ¿quién no ha borrado alguna porque no sale “bien” o porque la papada le está haciendo de enemigo?, pues esta acción se hace miles de veces al día. El doble cuello es un problema con el que lidian con el aspecto de sus cuellos.
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El cuello de ganso, como también se le conoce es cuando no hay un ángulo entre el cuello y la mandíbula, producto de la acumulación de grasa en la zona. “Esta grasa se encuentra debajo de la piel y por encima del llamado músculo platisma. Este músculo es plano, dividido en dos mitades y va desde el labio inferior y borde mandibular hasta la clavícula”, explicó el portal web de la clínica estética Antiaging Group Barcelona, España.
Entre las causas por las que ese ángulo cervicofacial no está definido es la piel flacida y músculo platisma descolgado, también hay un exceso de grasa superficial, entre piel y el músculo platisma, entre otros. Pero, esto no solo afecta las personas son sobre peso, pues algunas delgadas tampoco tiene un cuello definido.
Cómo disimular la papada en las fotos
No hace falta recurrir a programas de edición para borrar el doble mentón en las fotos, solo resulta necesario hacer ciertas poses para conseguir el efecto deseado.
1. Maquillarse
Si cuentas con tiempo, pues no dudes en aplicarte un maquillaje que te permita ver un cuello más estilizado. Solo hay que poner contorno con una brocha y extenderlo de arriba abajo. Primero te puedes poner la base para que quede más uniforme o utilizar polvos más oscuros.
2. Tomar la foto desde arriba
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Este consejo no falla. Procura tomar el autorretrato desde un punto más alto que tu cabeza, de modo que debas levantar el mentón, así camuflarás el exceso de grasa en la zona. Esta es una de las técnicas más populares en las redes sociales.
3. Levantar un poco el rostro y llevarlo hacia adelante
Esta pose abre la mandíbula y la acentúa, por lo que tu papada ni se notará. Intenta que no sea muy evidente que estás intentando salir sin papada en las fotos o tu pose quedará demasiado artificial.
4. Apoya la cabeza en tus manos
Con ayuda de una de tus manos, inclina la cabeza hacia un lado. Este método ayuda a estirar el cuello y a dirigir el interés de las personas hacia el encuentro entre tu mano y cabeza, muy lejos de la papada.
5. Sonríe
Esta estrategia no pretende esconder o camuflar la papada, sino minimizar su protagonismo en cualquier toma. Opaca el papel de tu cuello sonriendo naturalmente de tal manera que la alegría que transmite tu sonrisa pueda jalar más miradas que aquel “defecto” de tu cuello.
