La moda suele confundirse con superficialidad. Un término del que a la industria le ha costado mucho deshacerse. Lo que pocos conocen es que entre sus bondades, se encuentra algo más allá de vernos ‘bonitos’, repercutiendo hasta en nuestro estado de ánimo.
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Así es, la moda también la podemos utilizar como aliado si lo que buscamos es sentirnos más felices. Esto no significa que necesariamente tenemos que portar colores llamativos para que influya en nuestro ánimo, pues es un tema aparte de no necesariamente se relaciona con la psicología del color.
Más allá de la energía del amarillo, el equilibrio del blanco y la elegancia del negro, es la seguridad y todos aquellos elementos que nos hacen ser uno mismo, porque al final de todo, la moda es un medio para mostrarle al mundo quiénes somos, qué nos gusta y hasta cómo nos sentimos.
Y sí, aquel dicho que menciona “de la moda, lo que te acomoda”, no solo habla de la parte superficial o ceñirse a una tendencia, sino vestir prendas que se adapten a nosotros, que nos hagan sentir cómodos y seguros, que le griten al mundo quiénes somos.
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‘Dopamine Dressing’ o cómo utilizar la moda para ser felices
El término aparece por primera vez en 2020 luego de que Dawnn Karen, a quien se le conoce como ‘The Dress Doctor’, hizo una exhaustiva investigación sobre cómo el ser humano podía mejorar su estado de ánimo a partir de lo que usamos.
Y es que, siendo honestos, la moda es un arma de doble filo que, si bien, trae con ella una serie de beneficios, usarla de manera inadecuada, puede provocar serios problemas de inseguridad, trastornos alimenticios y otros problemas que pueden afectar a las personas.
Dicha investigación partió en plena pandemia, cuando el encierro, acabó con la energía de muchos, por lo que Dawnn Karen cayó en la cuenta que nuestra forma de vestir, también puede ayudarnos a mejorar nuestro estado de ánimo.
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“El ‘Dopamine Dressing’ o Moda Dopamina se trata de usar lo que te hace sentir bien. Para algunas personas, eso es cierto ajuste o silueta, y para otras, es un color, estampado o textura en particular. Para todos nosotros, la confianza llega cuando nos sentimos mejor”.
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¿Cómo unirse al Dopamine Dressing?
Esta tendencia fue adoptada por muchos influencers en redes sociales, y es que, como bien se ha mencionado, no se trata exactamente de vestir colores vibrantes, sino de algo más allá.
Lo único que tenemos que hacer es dar una mirada al pasado, y encontrar aquello que nos hizo sentir bien, una textura, un color, un accesorio. El punto exacto donde fuiste más feliz y ocupar esos elementos en nuestro presente, se trata de que ames lo que traes puesto, que sea divertido, no solo que exalte ciertos atributos o que sea necesariamente el último grito.
Habla de expresar lo que somos, nuestra filosofía y ser felices a partir de ello. El primer paso es determinar cómo te sientes, qué estado de ánimo buscas crear, lo segundo es dar una vuelta por tu armario, ahí encontrarás las piezas que más amas, haz un recuento de ellas, encuentra el factor común y duplícalo.
El tercer paso es buscar inspiración, la puedes encontrar en redes sociales, Pinterest, TikTok, y retomar algunos elementos que te hagan sentir bien; por otro lado, la cromoterapia es vital, y es que ayudará a saber qué colores son los adecuados y qué provoca cada uno de ellos.
Por último, solo queda experimentar con la textura, apuesta por lentejuelas, plumas, peluche, pedrería y otros elementos que añadan el toque divertido a tu look. Una vez teniendo en cuenta todos estos puntos, recuerda que todo siempre es con medida, ve poco a poco y no unas todos los elementos, pues menos es más.
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