Tendemos a relacionar el delineador de ojos para miradas ahumadas, oscuras y cargadas de intensidad. Pero ahora el eyeliner blanco se ha posicionado en las tendencias y lo pedirá a gritos este verano.
Comenzamos a ver desplazado el delineador negro por tonos más vibrantes como el amarillo o el azul para dar un makeup atrevido y luminoso.
Pero si nuestro objetivo es lograr luminosidad, nada como el color blanco.
Solo debes hacer un pequeño trazo y comprobarás que tus ojos se verán más radiantes, además de aparecer más grandes e incluso puede que cambie tu forma de expresión. Y esto es muy importante en estos tiempos en que las mascarillas han enfocado la atención sobre nuestra mirada.
¿Cómo podemos usar el eyeliner blanco?
El eyeliner blanco puede que a un primer vistazo pase desapercibido, pero el efecto que logra es tan silencioso como fresco.
Puedes usarlo como base bien pegado al rabillo del ojo, probar con aplicar un poco de lápiz debajo de la ceja para resaltar la zona.
Otra opción es usar el eyeliner en la línea de flotación para ejercer de efecto flash y desaparecer así el tono rojizo de nuestros ojos.
De igual forma puedes optar por el estilo flotante o combinarlo con el color negro. El objetivo es jugar con él hasta lograr el resultado más refrescante.
También podemos utilizar el blanco como base pero añadir dos tonos más para hacer un interesante trío que te de una mirada hipnotizante.
Ya sea que lo usemos formato lápiz o líquido, la idea es recuperar la esencia del maquillaje de los 90 que ha tomado terreno en la actualidad, incluso en los cortes de cabello ¿Te atreverías a probarlo?
