La clave cuando buscamos vernos bien después de determinada edad es la seguridad en ti misma y el amor propio. Si ya cumpliste con esos dos requisitos, entonces solo te falta tener un buen outfit en animal print.
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Sí, porque desde que revolucionaron la moda en la década de los sesenta, aunque ya ciertas estrellas lo empezaron a utilizar desde 1920, se convirtió en un básico que hemos confirmado que va bien a cualquier edad.
Sin embargo, después de los 40 años toma una dimensión mucho más sensual, atrevida y chic porque ya conocemos exactamente aquello que nos luce bien y cuáles son nuestros atributos a explotar, así que estas son las claves al combinar.
Cómo llevar un look de animal print después de los 40 años
Un mito que hay que desmontar en primer lugar, es que llevar estampado animal (o de cualquier tipo) no te hace menos sobria o elegante. Todo está en cómo se mezcle con el resto de las prendas.
Otro punto interesante si eres del grupo que prefiere pasar más desapercibida, es que no exclusivamente es una apuesta arriesgada porque lo puedes adaptar a tu personalidad.
Y por último, en este trío de normas ineludibles, es que buscar el balance siempre es la decisión más sana. De esta manera, mantendrás tus proporciones equilibradas, lucirás joven y no te aumentarás kilos de más.
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Por esta razón, escoger el tipo de estampado es muy importante. Mientras más grande sea este, mayor volumen dará, por lo que debes tenerlo en cuenta si quieres ocultar los rollitos o si lo utilizas en tus caderas.
Elige sabiamente de acuerdo con tu tipo de cuerpo, pero no lleves demasiados accesorios ni lo combines con alguna otra prenda que tenga este mismo estampado porque te verás sobrecargada.
Después de los 40 años, lo que queremos es vernos juveniles y sofisticadas, así que los básicos serán tus mejores amigos para acompañar tus outfits.
Mantenerse en la misma línea
Como te comentamos previamente, nada de escoger un total look en animal print y mucho menos ¡jugar con diferentes tipos de estampados o colores!
Quédate con un solo efecto y que esta pieza sea la protagonista absoluta de tu atuendo, porque de otra forma, rompe con la estética y armonía, opacando las zonas de mayores atributos.
Conoce tus proporciones
Justamente, si de resaltar la figura se trata, es importante que te analices. Si tienes busto grande y utilizas animal print, solo harás que se vea más grande, especialmente si tienes un escote pronunciado.
En este caso, opta por llevar prendas con el estampado en la parte inferior, en faldas o pantalones, y quédate con una camiseta básica en el superior. Lo mismo aplica en el caso contrario, si tienes piernas gruesas que desees estilizar.
No obstante, esto varía un poco cuando quieres verte delgada, ya que en este caso, te beneficia más utilizar neutros en faldas, shorts, pantalones, entre otros, y escoger una blusa o blazer de animal print con estampado pequeño.
Juega estratégicamente con todas las reglas de la moda, pero no te olvides de divertirte en el proceso, ya que hay que encontrar el punto donde se encuentran lo te gusta y lo que te luce.
Busca la armonía
Como mencionamos previamente, esto se logra añadiendo prendas neutras o básicas que pasan desapercibidas y son geniales como complementos.
Desde el blanco, negro, café, camel, beige, gris claro, entre otros, son tonalidades que pegan muy bien con prendas de animal print. Para tu maquillaje, sí puedes arriesgarte más con labios rojos o un delineado felino a juego.
Otra manera de incorporarlo a tu look es mediante los accesorios, como un buen bolso o unos bellos stilettos, que quedarán divinos pero con otros atuendos neutros.
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