Antes del estreno de Emily in Paris, la popular serie de Netflix que retrata la vida de las mujeres modernas que aman la moda, las boinas no estaban dentro del panorama de las tendencias.
Imitando a otra producción de ese estilo que fue precursora para su realización, Sex and the city, llegó para imponer nuevas formas de combinar la ropa (arriesgadas y coloridades, debemos decir) y rescatar accesorios que habían quedado relegados ante otros.
Es así como las boinas, especialmente la icónica roja que luce en varias escenas, se convirtieron en uno de los complementos ideales para este otoño, que te ayudan a mantenerte abrigada y seguir viéndote coqueta.
Cómo combinar las boinas
Lo mejor de este accesorio es que se adapta a todos los gustos. Su versión más clásica de fieltro negro es un básico de la moda de inspiración parisina que es muy versátil a la hora de armar looks pero también hay opciones más refinadas como el charol o animal print.
Su inclusión en los armarios está especialmente pensada para temporadas como el otoño e invierno, aunque hay unas arriesgadas que se atreven a utilizarlas en el verano en compañía de telas finas en faldas midi y tops casuales.
No obstante, ahora que entramos en la recta final del 2020 lo mejor es incorporarlas en los outfits cotidianos bien sea con blazers, gabardinas, vestidos largos o pantalones, pues siempre nos adornarán con su encanto natural.
Justamente de esa forma es que lo prefiere la influencer de moda, Cristina, la cual a través de su cuenta de Instagram ha mostrado lo bien que sientan las boinas para elevar sus atuendos diarios.
En esta ocasión, se decantó por pantalones culotte, un suéter de estampado de cuadros marrón y zapatillas Converse, que le permiten estar cómoda para llevar a cabo su agenda sin renunciar al toque de feminidad que le da este tipo de sombreros.
De igual manera, la española ha hecho combinaciones más arriesgadas (y estilosas) en las que añadió esta prenda a un outfit más formal, con un resultado más que positivo.
Se trató de un vestido largo verde oliva con abertura en sus piernas, al cual le dio un aire bohemio con un chaleco estampado de Zara, botas altas y una boina morada que fue el punto distintivo para que su look llamara la atención, sin perder la armonía.
La misma boina, diferentes looks y para diferentes ocasiones. Perfecto, ¿no?
El color es la clave
En el mismo sentido, otro truco que nos comprueba la joven es que lucen de mejor manera cuando son ese toque de tonos vibrantes que le falta al otoño y que pueden romper la paleta cromática que escogimos para los outfits o bien, complementarlas.
En una oportunidad, ella optó por hacer ‘match’ con el tono de su blazer y sus boinas en azul celeste, lo cual luce muy elegante, pero no pierde el aire juvenil con sus jeans de dobladillo pronunciado, botas de suela track y un body verde que se combinó muy bien.
Por otro lado, igualmente son atractivas cuando se salen de la gama de color como sucede al llevar un blazer fucsia y otras prendas básicas en neutros, mientras que las boinas toman el protagonismo, esta vez en verde.
Eso no significa que las boinas en tonos nude hayan quedado descartadas. Al contrario, en beige, negro o gris siempre serán ese modelo que va con todo tipo de outfit, de género, edad y cuerpo, lo que sin duda, hace que los atuendos luzcan más sobrios.
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