Los labios resecos aparte de ser una experiencia dolorosa, también denotan una falta de preocupación en el aspecto personal. Al igual que el cuidado de las uñas y manos, son nuestra carta de presentación.
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Se manifiestan síntomas de sequedad, se perciben grietas, se enrojece la zona, y todo esto conduce a lamerse los labios con frecuencia.
Son diversas las razones de esta causa, como el clima por las temperaturas muy frías o muy calientes; la exposición al sol y a los vientos fuertes; la ingesta de ciertos medicamentos; y una falta de hidratación.
Primero que todo, para resolver este problema es necesario mantenerlos constantemente hidratados y protegidos con algún bálsamo, ya que, el área de los labios no es capaz de producir su propia humedad.
Como es una zona sensible y delicada, se debe mantener protegida de los agentes externos del medio ambiente. Por eso, compartimos algunas recomendaciones para sanarlos rápidamente.
Hidrata todo tu cuerpo
Bebe mucha agua, al menos 2 litros por día. Esto mantendrá hidratado todo tu organismo, por lo que será más difícil que se resequen los labios y otras zonas corporales.
Invierte en un buen bálsamo labial
Lo ideal es que contenga cera de abeja, manteca de karité u otros aceites vegetales para mantenerlos humectados. Además, es necesario que incluyan filtro solar. Debes aplicar frecuentemente este producto para evitar lamerte la boca.
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Protégete del clima
Cuando te enfrentes a un clima frío, trata de tapar tu boca con una bufanda. A la vez, sigue usando el bálsamo para complementar el cuidado.
Exfolia de vez en cuando
Para eliminar las células muertas puedes usar remedios caseros. Frotar los labios con una mezcla de miel y azúcar, o de aceite de oliva y azúcar, resultan efectivos para renovarlos.
También puedes exfoliarte con un cepillo de dientes suave y vaselina por medio de movimientos circulares.
Evita malos hábitos
Fumar, tomar con sorbete y arrugar los labios, generan marcas antes de tiempo.
