Ser mamá es una bendición, pero es una tarea difícil, especialmente cuando tus hijos hacen berrinches y se enojan, llevándote al límite.
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Y es que, aunque los ames, en estos momentos no sabes qué hacer ni cómo comportarte, para no perder la paciencia y calmarlo.
Los gritos, llanto y frustración nos desesperan, pero también forman parte importante para el desarrollo de la inteligencia emocional en los niños.
Pero, es importante que te comportes de la manera correcta para calmarlos, ayudarlos, y enseñarles valiosas lecciones.
Especialistas aconsejan a los padres ayudar a los hijos a comprender sus emociones, y canalizar estos arrebatos, y por eso, te ofrecemos algunos consejos.
Cómo enfrentar los berrinches de tus hijos cuando están enojados
Háblale con voz suave, pero con firmeza
Hablarle con voz suave a tus hijos en medio de un berrinche es lo primero que debes hacer, pero siempre con firmeza, haciéndole saber que todo tiene solución.
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Y es que, si le gritas, solo lo empeorarás, harás que se altere, y le demostrarás que la solución siempre serán los gritos, dándole un mal ejemplo.
Si le hablas suave, pero firme, ayudarás a que se calme, lo harás sentir seguro, y cuando se calme te podrá contar lo que le sucede para que lo ayudes.
Siéntate y ponte a su altura
Es importante que te sientes y te pongas a su altura, incluso abrazarlo u ofrecerle un abrazo para que se calme.
Solo cuando esté tranquilo, comienza a hablar con tu pequeño, pues si lo haces en medio del llano y gritos, no lograrás nada.
Ayuda a que se explique con palabras
Cuando logres calmarlo, es importante que lo ayudes a que te explique con palabras qué es lo que le sucede.
Enséñale a que se exprese sin llorar, ni gritar, ni hacer pucheros, para que así lo puedas ayudar a resolver el problema que le perturba.
Esto permitirá que convierta sus emociones en palabras y que así sepas qué es lo que siente, y lo que le sucede.
Establece reglas
También es importante establecer reglas básicas como que no está permitido gritar, y enséñale que la mejor manera es hablar cuando algo le sucede.
Así podrás enseñarle que cuando algo le ocurra lo soluciona hablándolo contigo, para que lo orientes y lo ayudes a buscar una solución, pero sin formar berrinches.
Así se sabrá comportar y entenderá cómo actuar cuando algo le moleste o perturbe.
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