Cuidarse en el embarazo y durante nueves meses garantizará el nacimiento de un bebé sano, fuerte y saludable.
Y es durante ese período de tiempo que la mujer embarazada necesita de más descanso y cuidados óptimos para asegurar un futuro parto sin problemas o complicaciones.
Pero, en algunas ocasiones, la mujer embarazada puede presentar algunas señales, advertencias o síntomas que revelan la posibilidad de que en un futuro podrás presentar complicaciones y durante los nueve meses antes de dar a luz.
Estas señales pueden revelar fácilmente que se están originando problemas en el embarazo, por lo que se debe estar muy atenta para evitar males en el futuro y, en especial, en el momento del parto.
Cuidados en el embarazo
Te presentamos a continuación las complicaciones más comunes y pueden surgir durante el embarazo:
Hinchazón en pies y brazos
Una ligera hinchazón es bastante normal durante el embarazo, pero puede convertirse en una preocupación si la misma es dolorosa y viene acompañada de enrojecimiento y erupciones.
Lo más probables es que un coágulo de sangre podría ser la razón detrás de esto, por lo que debes controlar de cerca cualquier anomalía en la piel. Si es así no dudes en acudir de inmediato al médico.
Fuertes contracciones
Si comienzas a experimentar contracciones fuertes en los primeros cuatro meses del embarazo esto puede ser una complicación de cuidado y supervisión.
Las contracciones fuertes y dolorosas, mucho antes de la fecha de parto, pueden ser una señal temprana del trabajo de parto y puede desencadenar un aborto espontáneo. Si esto te sucede recurrentemente no dudes en consultar con un especialista.
Pérdida de la visión
Si tienes problemas para enfocar o tienes visión borrosa debes comunicarte con el médico de inmediato. Esto puede volverse grave, especialmente para las pacientes que padecen diabetes, porque podrías perder el equilibrio y darte un fuerte golpe en la barriga, lo que pondría en riesgo la vida de la madre y el bebé.
Sangrado
Un poco de sangrado durante los primeros días del embarazo, es bastante normal. También se conoce como sangrado de implantación. Pero, si experimentas sangrado abundante, faltando pocas semanas para el parto, debes tomarte esta complicación en serio.
Las mujeres con placentas envejecidas tienen un mayor riesgo de sangrado, y esto puede significar problemas graves para la madre y el bebé que está por nacer.
Presión arterial alta
La presión arterial alta, también denominada hipertensión gestacional en el embarazo, ocurre cuando se estrechan las arterias que transportan la sangre del corazón a los órganos del cuerpo.
En el embarazo, esto puede dificultar el pasaje de la sangre hasta la placenta, la cual le proporciona nutrientes y oxígeno al feto. La reducción del flujo sanguíneo puede enlentecer el crecimiento del bebé y aumentar el riesgo para la madre de tener un parto prematuro.
Secreción líquida
La secreción de abundante líquido vaginal puede ser peligrosa. Esto revela una señal de que el parto está en camino y el bebé ya quiere nacer.
Básicamente, ese “líquido abundante” es el líquido amniótico, que es lo que envuelve al bebé. Es esencial para su crecimiento y desarrollo.
Fuertes infecciones
Las infecciones durante el embarazo son complicaciones a las que siempre se les deben dar seguimiento. Las mismas pueden causar o contribuir a la pérdida del embarazo/aborto espontáneo (antes de las 20 semanas de embarazo)-
También puede causar un embarazo ectópico que es cuando el embrión se implanta fuera del útero, habitualmente en una trompa de Falopio.
Otros riesgos son: trabajo de parto y parto prematuros antes de completar 37 semanas de embarazo), bajo peso del bebé al nacer, defectos de nacimiento, incluidos ceguera, sordera, deformidades óseas y discapacidad intelectual. Hasta, incluso, muerte neonatal.
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